El buque Juan Sebastián de Elcano zarpa del puerto de Cádiz con la princesa Leonor a bordo

Los reyes se han despedido esta sábado entre sonrisas, lágrimas y mucha emoción a la heredera del trono

Los reyes se han despedido esta sábado entre sonrisas, lágrimas y mucha emoción de la princesa Leonor, que este mediodía ha partido, junto a otros 75 guardiamarinas, en el 97 crucero de instrucción del buque escuela de la Armada española Juan Sebastián de El Cano.

Desde el muelle y a escasos metros del buque, con la princesa Leonor y el resto de sus compañeros en formación para la partida del buque, los reyes han lanzado besos, en ocasiones abrazados para apoyarse en este momento de emoción, mientras el velero bergantín-goleta zarpaba del puerto de Cádiz.

«Muy emotivo lógicamente», ha dicho el rey a los periodistas antes de embarcarse, con la reina, en el barco «Vigía de la Armada» para despedir desde el mar al buque escuela, que inicia hoy un recorrido de seis meses y que se ha alejado del muelle al son de la «Salve marinera».

La reina no ha podido evitar las lágrimas al ver alejarse a su hija en el navío, mientras la princesa, sonriente y emocionada, agitaba su gorra de guardiamarina, como sus compañeros, para despedirse de los familiares. Y el rey, como muchos otros padres, ha sacado su móvil para captar el emocionante momento de la partida, que él mismo vivió en 1987.

«Hay más madres», ha comentado la reina a los periodistas cuando le han preguntado por sus lágrimas y la visible emoción con la que ha vivido la partida, en referencia a las que también han despedido este sábado desde el muelle a sus hijos guardiamarinas.

Han sido más de 1.600 familiares de los guardiamarinas y de los miembros de la dotación del barco, un total de 250 personas, las que han acudido al muelle para esta despedida y que han recibido con vivas a los reyes y al presidente andaluz, Juanma Moreno, mientras que la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha sido abucheada.

Robles ha comentado posteriormente a los periodistas que le había encantado «ver a los reyes como padres».

«Estamos todos muy orgullosos y muy contentos», ha añadido Robles tras explicar que el buque escuela, que siembre es «una embajada» navegante de España, este año lo es «mucho más», al llevar a bordo como guardiamarina a la princesa de Asturias. «Es un orgullo verla y, además, a mi particularmente como mujer, me ilusiona mucho verla hoy aquí».

La ministra, que ha visto retrasada su llegada al acto debido a la niebla, ha sido abucheada por el público. «Son siempre una minoría. La mayoría de la gente viene hoy a disfrutar ... siempre hay que respetar a todo el mundo», ha indicado al respecto.

Poco antes de partir, la princesa de Asturias ha llegado en formación con sus compañeros al Convento de Santo Domingo de Cádiz, donde se ha celebrado la tradicional misa a la que asisten los guardiamarinas antes de su marcha, de la que han salido en procesión con la imagen de La Galeona, como es conocida la imagen de la virgen del Rosario, patrona de la ciudad, y que ha embarcado con ellos.

A las once de la mañana han llegado Felipe VI y doña Letizia al muelle y han subido a bordo para saludar a la tripulación y despedir a todos los guardiamarinas que atravesarán el Atlántico, donde el monarca ha sido recibido con honores, 21 cañonazos y 7 vivas a España y les ha dirigido unas palabras.

«Recordad siempre que lleváis el prestigio y la imagen de España sobre vuestros hombros», les ha dicho el rey: «A punto de zarpar para vuestro crucero de instrucción la reina y yo queremos desearos buena mar, buenos vientos, pero sobre todo que aprovechéis esta etapa de vuestra formación como marinos, como militares y también en vuestra proyección en el mundo como españoles», ha dicho Felipe VI, que realizó este crucero de instrucción como guardiamarina en 1987.

A estos futuros oficiales les ha recordado que representan a una Armada con un legado de siglos que deben «honrar y respetar» pero también una Armada del siglo XXI «que volverá a recorrer con Elcano mares y océanos» y les ha deseado que disfruten de esta experiencia y les ha animado a que dejen «el pabellón bien alto en los mares y por los puertos» a los que arriben.

Tras partir de Cádiz, el buque Juan Sebastián de Elcano llegará la próxima semana a Canarias. El recorrido, de seis meses, incluirá además Uruguay, Chile, Perú, Panamá, Colombia, República Dominicana, Estados Unidos y, de vuelta a España, Gijón y Ferrol antes de su llegada a la Escuela Naval Militar en Marín, el 14 de julio y su posterior regreso a Cádiz.

Aunque Leonor de Borbón desembarcará en Nueva York para volar a España y permanecer un mes a bordo de una fragata, antes de volver a unirse a sus compañeros, en el último tramo del crucero, en Gijón, el 7 de julio.