Conmoción mundial por el hallazgo de cientos de civiles ejecutados en Bucha
Rusia niega los crímenes y asegura que las imágenes publicadas por el Gobierno ucraniano son una «provocación»
El hallazgo de cientos de cadáveres de civiles ejecutados de manera sumaria tras la retirada rusa de los suburbios del norte de Kiev conmocionó ayer a Ucrania y al conjunto de Europa, cuando las imágenes de los medios de comunicación arrojaron luz sobre la dimensión de una matanza de la que Rusia niega toda responsabilidad.
El ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, afirmó que es la peor «masacre» en Europa desde la II Guerra Mundial, y agregó que «aún recolectamos y buscamos cuerpos, pero ya hemos contado cientos,« de acuerdo con la agencia Interfax.
El alcalde de Bucha, una ciudad de 35.000 habitantes al noroeste de la capital ucraniana, anunció ayer que, después de la «liberación» de la zona el pasado 31 de marzo, 280 cadáveres habían sido enterrados ya en una fosa común, ante la imposibilidad de usar el cementerio municipal.
«Algunos estaban tirados en la acera, otros al lado de un coche o de una bicicleta,« afirmó en un vídeo difundido por Facebook el regidor, Anatoli Fedoruk, que indicó que los soldados rusos habían acabado con «familias enteras de niños, mujeres, abuelas, hombres». En imágenes difundidas por el Gobierno ucraniano pueden verse docenas de cuerpos con ropas civiles, muchos de ellos maniatados, que siguen en las calles mientras se producen las labores de desminado, así como cadáveres semicubiertos de tierra, una visión que confirmaron reporteros de medios internacionales que accedieron a la zona, bajo toque de queda hasta mañana martes.
La reportera de «Kyiv Independent» Anastasia Lapatina afirmó que además se habían encontrado los cuerpos desnudos de cinco mujeres, mientras que el periodista Stanislav Asiejev comentó que el emplazamiento de muchos cadáveres sugería que los rusos habían ido casa por casa ejecutando de forma «sistemática» a los hombres en edad de combatir.
La cifra total de víctimas podría ascender todavía de forma significativa, ya que según datos de los servicios sanitarios locales, al menos varias docenas de cuerpos fueron sepultados en fosas comunes en marzo, antes de que se retiraran las tropas rusas.
Crímenes de guerra
El ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, solicitó ayer que la Corte Penal Internacional (CPI) y otras organizaciones envíen una misión a Bucha y al resto de suburbios que han estado bajo control ruso para recabar pruebas de posibles crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
El Ministerio ya ha enviado la petición oficial a la CPI, según fuentes ucranianas.
Las autoridades en Kiev han reaccionado con horror a los hallazgos que se han producido en Bucha, que según han manifestado tenían como objetivo eliminar al mayor número posible de civiles, y han instado a los Gobiernos europeos a redoblar la presión sobre Moscú.
En este sentido, el asesor presidencial Mijailo Podolyak culpó a la reticencia de los líderes europeos a la hora de «provocar a Rusia» de las atrocidades «inefables» en Bucha, Irpin y Hostomel, que comparó con Srebrenica y Treblinka y preguntó si «organizarían otra cumbre en la que expresar preocupación y menear la cabeza».
Una «provocación»
Por su parte, Rusia negó ayer que sus tropas militares hayan asesinado a las víctimas de Bucha y aseguró que todas las fotografías y los vídeos publicados por el Gobierno ucraniano son una «provocación». «El Ministerio de Defensa de Rusia refuta las acusaciones del régimen de Kiev sobre el presunto asesinato de civiles en la localidad de Bucha, región de Kiev», señaló la entidad castrense en su cuenta oficial de Telegram.