Alemania: Tras el fin de la coalición de Scholz, se impone el debate sobre la fecha de los comicios anticipados
El canciller federal quiere aguantar hasta marzo en el poder y la oposición pide comicios lo antes posible Berlín
Jornada frenética en Berlín tras la ruptura de la coalición tripartita de gobierno provocada por los liberales. Después de que el canciller federal, Olaf Scholz, cesara a última hora del miércoles a su ministro de Finanzas y presidente del Partido Liberal (FDP), Christian Lindner, y comunicara el fin de la colaboración con esa formación, este jueves hubo un aluvión de reacciones, la primera del presidente federal, Frank Walter Steinmeier, que advirtió a los partidos políticos contra todo tipo de "tácticas y escarceos" y afirmó que "el final de una coalición no es el final del mundo", sino "una crisis política que debemos superar cuanto antes".
Steinmeier comentó estar dispuesto a convocar elecciones anticipadas en el momento en el que Scholz pierda, como está previsto, la moción de confianza a la que ha anunciado que se presentará a mediados de enero. Los plazos planteados por el socialdemócrata Scholz -moción de censura en enero y elecciones anticipadas a finales de marzo-, no convencen, sin embargo al resto de los partidos, con la sola excepción de Los Verdes, que mantienen su alianza con el SPD y están dispuestos a seguir gobernando en minoría. El tripartito "es historia desde anoche", constató el presidente de la opositora y conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU), Friedrich Merz, quien afirmó este jueves que "no existe motivo alguno para esperar a enero a plantear la moción de confianza.
Debe hacerlo inmediatamente. Lo más tarde a finales de la semana próxima", advirtió Merz, que al mediodía de este jueves celebró un primer encuentro con Scholz que duró tan solo 25 minutos y acabó sin resultados. Scholz insistió en esperar a enero para la moción de confianza y Merz presionó para adelantar los plazos al máximo y facilitar elecciones lo más tarde el mismo enero. Sabedor de que todas las encuestas dan a los conservadores un triunfo seguro y ventajoso en unos comicios adelantados, el líder de los conservadores está impaciente. "Con el fin del tripartito ha acabado la legislatura", afirmó el presidente de la CDU.
Tras calificar de "arrogante e irrespetuoso" todo intento de prolongar la presente legislatura, Alexander Dobrindt, jefe del grupo parlamentario de la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), hermana regional de la CDU, señaló que con la marcha de los liberales deja de existir una mayoría parlamentaria que otorgue su confianza al canciller federal. "Los restos del tripartito no tienen derecho a continuar gobernando", comentó Dobrindt para exigir igualmente que Scholz plantee lo antes posible una moción de confianza, de manera que unas elecciones adelantadas puedan tener lugar el próximo enero.
Mientras tanto y tras el cese de Lindner, dos de los otros tres ministros liberales presentaron su dimisión este jueves, aunque el cuarto, el titular de Transportes, Volker Wissing, anunció que, a petición de Scholz, continuará en el cargo. Wissing subrayó que, para no perjudicar con su decisión al FDP, abandona inmediatamente esa formación. La disidencia del titular de Transportes saca a la luz la división en el seno de los liberales, donde no todos aprueban la decisión de Lindner de reventar inesperadamente la coalición, cuando sus líderes se encontraban reunidos para tratar de solventar sus diferencias en materia presupuestaria, económica y financiera.
La descomposición del tripartito por el hasta ahora ministro de Finanzas es contemplada por los analistas políticos en Berlín como una huida hacia adelante de Lindner y su formación. Todas las encuestas sin excepción sitúan al FDP fuera del Bundestag en unos comicios adelantados, una tendencia que no ha cambiado desde hace muchos meses y que ha causado pánico entre los liberales, conscientes de formar parte de la coalición de gobierno más impopular en la historia de la República Federal. Lindner espera que la espectacular ruptura de la coalición y el provocado adelanto de los comicios legislativos conlleven beneficios electorales para su partido. Al anunciar el cese de su hasta este miércoles aliado, Scholz criticó a Lindner por su "falta de responsabilidad" en el trabajo del gobierno y por su falta de voluntad para aceptar propuestas en beneficio del país. A Lindner solo le preocupa su clientela y la supervivencia a corto plazo de su partido.
"Resulta incomprensible un egoísmo así", dijo el canciller federal, quien comentó haber perdido toda confianza en el que fuera su ministro de Finanzas. "Con demasiada frecuencia se ha dedicado a tácticas partidistas mezquinas. Con demasiada frecuencia ha roto mi confianza", sentenció el jefe del gobierno alemán, que desea hablar "lo antes posible" con Merz, candidato de los conservadores para la Cancillería Federal. También el vicecanciller federal y ministro de Economía, Robert Habeck, criticó a los liberales y afirmó que el fin de la coalición habría sido "evitable" si Lindner y el FDP se hubiesen mostrado dispuestos al compromiso en vez de tensar la cuerda con exigencias inaceptables.
Mientras tanto, Scholz, que aspira a gobernar en minoría con Los Verdes hasta marzo, recompuso su gabinete con celeridad. Sucesor de Lindner como ministro federal de Finanzas será Jörg Kukies, hasta ahora secretario de estado de Finanzas en la Cancillería Federal y asesor personal en materia económica del jefe del gobierno germano. Las carteras de Justicia y Educación y Ciencia que ostentaban hasta ahora los liberales Marco Buschmann y Bettina Stark-Watzinger, serán asumidas suplementariamente por otros ministros que forman ya parte del gobierno.
A la exigencia de un adelanto electoral lo más pronto posible se ha unido también la patronal alemana. "Alemania necesita un giro económico. Esto requiere una decisión sobre la dirección a tomar y una mayoría capaz de adoptar medidas. Por ese motivo son necesarias con urgencia unas nuevas elecciones", señaló Stefan Wolf, presidente de la patronal del metal Gesamtmetall, quien demandó un golpe liberador con grandes y ambiciosas medidas del futuro ejecutivo alemán.