Los inquilinos que surtían de marihuana al norte de Europa desde Santa Oliva
Los Mossos iniciaron la investigación el pasado mayo
La investigación comenzó en mayo cuando los Mossos d’Esquadra recibieron informaciones sobre una posible plantación de marihuana en Santa Oliva.
Era una casa alquilada hacía dos años. Desde entonces los propietarios ya habían advertido problemas con los inquilinos por temas de suministros y obras en el interior del inmueble.
Los Mossos comprobaron que en la casa había un consumo desproporcionado de electricidad y que además la tenían pinchada, lo que daba fuerza a la posibilidad de que albergase una plantación de marihuana.
La investigación determinó que tras la plantación había un grupo criminal por tres hombres con las tareas de cultivo, preparación y venta distribuidos.
630 plantas
El pasado miércoles los Mossos accedieron a la vivienda y pudieron detener a un hombre además de desmantelar 630 plantas con un peso de 200 kilos. También desarticularon la infraestructura para el crecimiento de las plantas valorada en unos 80.000 euros.
Los traficantes habían modificado la vivienda para el cultivo intensivo de la marihuana y usaban bombonas de dióxido de carbono para acelerar el crecimiento de las plantas y obtener más cogollos.
Las plantas y la droga localizada tendrían en el mercado un valor de 380.00 euros. Los investigadores señalan que el material se exportaba al norte de Europa.
El detenido, de 22 años, ha pasado a disposición judicial mientras que para los otros dos individuos se ha dictado una orden de búsqueda y detención.