«La innovación está en nuestro ADN», asegura Àlex Illa, fundador de Priorat R&D Lab, una bodega y microdestilería en Bellmunt del Priorat que rescata fórmulas y recetas tradicionales y las adapta a «las preferencias del consumidor actual». La empresa arrancó en 2011 y está ubicada en el antiguo Celler Simó, edificio de mediados del siglo pasado. Produce diversos tipos de vermut -bajo la marca Dos Déus-, ratafía y nojae, un licor de flor de sauco. Tiene uno de los pocos alambiques de Catalunya.
«La innovación está en nuestro ADN»Elabora anualmente 60.000 botellas de vermut -va a por las 70.000 en 2022- y 1.500 de ratafía. España y Estados Unidos, donde la coctelería tiene mucho tirón, son sus mercados principales. «Estamos abriéndonos también a Reino Unido, Bélgica y Alemania», dice Illa, técnico en viticultura y ligado a la industria de las bebidas desde los 19 años. Su familia tenía una tienda especializada en vinos y destilados.
Priorat R&D Lab experimenta constantemente para dar con nuevos productos, sabores y aromas. Es un como un laboratorio que conjuga «las tradiciones de la tierra, nuestras raíces y la actualidad». «Cuando salió Dos Déus al mercado éramos los únicos que madurábamos vermut en barricas de jerez durante al menos dos años. Fuimos los primeros en comercializar un vermut caliente y en sacar uno ahumado. Además, utilizamos packaging diferentes a los que se usan tradicionalmente», explica Illa.
Un proceso de producción basado en la innovaciónLa empresa, que tiene cinco trabajadores «entre fijos y puntuales en momentos de embotellar», emplea materia prima de proximidad para sus creaciones. «Siempre que podemos apostamos por productos de la zona, tanto en los vinos base como en las hierbas», cuenta Illa. Su ratafía está elaborada con magnolias recogidas a mano en campos de Bellmunt del Priorat y sigue la receta tradicional del pueblo que ha pasado de generación en generación. De hecho, las primeras botellas estaban etiquetadas con las firmas de vecinas que contribuyeron a mantener viva esta fórmula.
El vermut es su producto estrella. Fue la bodega más laureada en la pasada edición de los premios Vinari, que distinguen a los mejores vinos catalanes del año: gran oro con DD Origins negro, oro con DD Origins blanco y oro con DD Reserva. A principios de año también destacó en el prestigioso concurso internacional San Francisco World Spirits Competition, con un oro para DD Origins negro, plata para DD Origins blanco y plata para DD Estrellas.
Su novedad en este 2021 fue un vermut ahumado inspirado en la leyenda de los dips -perros mitológicos- de Pratdip. Illa es un apasionado de los whiskies y quiso probar un vermut elaborado con hierbas ahumadas, como los whiskies de Islay, madurado durante unos meses en barricas de roble americano extratostadas como las que se utilizan en la maduración del bourbon. Toda su producción está ya vendida.
¿El vermut está de moda? «Aquí siempre se ha bebido, pero ahora hay un repunte y se ha convertido en una tendencia que se está moviendo por distintos países. Ya no es solo un ingrediente en un cócteles, sino que el momento del aperitivo está ganando adeptos», comenta Illa. Catalunya, Madrid, Valencia y País Vasco es donde hay más incondicionales.
La pandemia ha supuesto un freno importante tanto en el mercado nacional como en las exportaciones al extranjero. «Por suerte, se está recuperando rápidamente y la gente vuelve a tener ganas de salir y disfrutar de un buen aperitivo», sostiene Illa, que avanza que el objetivo de Priorat R&D Lab «para el próximo año es más cualitativo que cuantitativo. Trabajamos para conseguir un reconocimiento por nuestra calidad y no tanto para aumentar nuestra producción».
