Estamos atravesando una era digital donde la aplicación de las tecnologías abre nuevos horizontes a las empresas. Un ejemplo de estas herramientas es la automatización inteligente -que, entre otros, incluye la RPA (Robotic Process Automation), capacidades de autoaprendizaje o procesamiento de lenguaje natural- que ya es indudable que permite transformar los procesos de negocio y generar ventajas operativas y competitivas.
A pesar de ello, seguimos observando que las empresas sufren ciertas barreras para iniciar o continuar el camino de transformación. Según nuestra encuesta anual sobre el grado de avance de aplicación de estas tecnologías, los dos principales hándicaps señalados por las compañías en todas las etapas de adopción de la tecnología son la fragmentación de los procesos y la preparación en materia de TI.
Además, últimamente, estamos observando dificultades adicionales como la falta de presupuesto para nuevas inversiones o los tiempos de despliegue.
Para superar dichas barreras en el ámbito de automatización está cobrando fuerza un nuevo concepto: Robot as a Service, un servicio integral para la automatización en modelo de pago por uso.
Se trata de un servicio gestionado que comprende tanto el desarrollo de automatizaciones como su ejecución y monitorización recurrente. Incluye todos los componentes de hardware y software necesarios incluyendo las licencias y la infraestructura que los soporta. Únicamente requiere de una conexión remota a las aplicaciones y sistemas de las organizaciones.
Un ejemplo trasformador de uso de esta automatización inteligente lo encontramos en su utilización como herramienta para conocer con precisión y a demanda, los precios que aplica el canal de venta a los productos de un determinado fabricante y los que aplica a los de sus principales competidores en productos similares.
Estamos ante un cambio completo del mindset al tratarse de un modelo totalmente flexible en modalidad de pago por uso. Aporta agilidad en el arranque del proyecto y posibilita el despliegue de automatizaciones en cuestión de semanas, minimizando la inversión inicial.
Robot as a Service ha sido uno de los aspectos clave en los planes de continuidad durante la pandemia y en el ‘next normal’. Aporta todas las ventajas de las tecnologías más disruptivas en un modelo muy atractivo que permite escalar y desescalar según las necesidades de las organizaciones.