Los jóvenes no pueden comprar su primera vivienda hasta que tienen, como mínimo, 33 años, según un estudio de donpiso. Esta es la media de edad en que se firma la primera hipoteca, de acuerdo con el informe, que atribuye el retraso en la edad de emancipación a la «precariedad laboral juvenil» y la «dificultad para obtener financiación sin tener ahorros. Todo esto hace que sólo uno de cada cinco jóvenes españoles (21%) de entre 16 y 29 años viva independizado.
En el caso del alquiler, el informe fija la barrera mínima en los 27 años. En este sentido, el aumento de las rentas en las grandes capitales está suponiendo un deterioro en la economía juvenil. Así, entre los jóvenes de entre 30 y 34 años, el gasto en el alquiler ocupa más del 60% de su salario, lo que agota sus ahorros de cara a una futura compra.
El estudio destaca que no es hasta los 30 años cuando los datos de compra de la primera vivienda suben considerablemente, con un 49% de las personas que decide adquirir una vivienda, mientras que el 43% opta por el alquiler. En estos casos sin embargo, los jóvenes de entre 30 y 34 años deben destinar el 60% de su sueldo a pagar la mensualidad, lo que agota sus ahorros de cara a una futura compra.
En las condiciones actuales, un joven necesita contar con el 20% del precio total del inmueble, con un valor de 250.00 euros por la compra de una vivienda estándar, lo que supone tener ahorrado 50.000 euros. En el caso del alquiler, son necesarios unos 1.500 euros de inversión inicial. El subdirector general de donpiso, Emiliano Bermúdez, ha apuntado que la falta de estabilidad laboral y económica, sumada a los inconvenientes para obtener una hipoteca, está «dificultando la compra de una primera residencia por parte de un colectivo que demanda vivienda pero no cuenta con el presupuesto para adquirirla».
