El IPC anual en las comarcas del Camp de Tarragona y las Terres de l’Ebre ha subido cuatro décimas según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En julio se situó en el 1,9, mientras que durante el mes de agosto aumentó hasta el 2,3. Aun así, se mantiene por debajo del IPC de Catalunya, que ha cerrado en 2,5.
En Tarragona, también ha ascendido una décima el índice mensual, del 0,4 en julio al 0,5 en agosto. Los alimentos y las bebidas no alcohólicas continúan encabezando la subida más elevada, situándose un 10,9% más caros que el año pasado. Aun así, han bajado 0,8 puntos en comparación a la variación del mes anterior, que repuntaron casi un punto. El transporte se encarece, pasando del -4,9 al 2,2.
La variación anual de la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles sigue siendo negativa (-19,7). Así, cae 2,6 puntos comparándolo con el mes de julio y acumula tres meses consecutivos de descenso.