La inflación se ha moderado seis décimas en febrero, hasta el 2,8%, la tasa más baja desde agosto de 2023 y debido principalmente al descenso de los precios de la electricidad y a la estabilidad de los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Según el dato adelantado del índice de precios de consumo (IPC) publicado ayer jueves por el INE, en este comportamiento de la inflación destaca el abaratamiento de la electricidad frente a la subida en febrero de 2023.
También tiró a la baja del IPC la estabilidad de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, que aumentaron en el mismo mes del año anterior.
Los recibos de la luz se llevarán, sin embargo, una desagradable sorpresa a partir de hoy cuando el IVA (Impuesto Valor Añadido) de la factura de la luz suba del 10% actual al 21%. Lo hará paradójicamente provocado por el desplome de los precios eléctricos que han venido sucediéndose en febrero.
No hará falta aprobar ninguna nueva norma ni establecer cambios legales. Los recibos emitidos a partir de esa fecha incluirán el nuevo tipo de gravamen para los consumos a partir del 1 de marzo. Es decir, podrán llegar facturas con un IVA del 10%, hasta el 29 de febrero, y otro del 21%, a partir de esa fecha.
El descenso de precios eléctricos de febrero ha sido completamente inesperado por todos los agentes del mercado.
Pero ha llegado de forma repentina gracias a los diversos frentes meteorológicos que han atravesado la Península, con la activación de las centrales eólicas y fotovoltaicas, que son las que más rebajan los precios y las que más energía han aportado en el último mes.
Respecto a la inflación, sigue conteniendo la tasa de precios la prórroga de algunas medidas del Gobierno contra la inflación. El 1 de enero el Ejecutivo extendió durante el primer semestre la reducción del IVA de los alimentos de primera necesidad como leche, pan, huevos, queso, legumbres o verduras.
Para este grupo se mantendrá el 0% de IVA, mientras será el 5% para otros como pastas o aceites. En marzo es probable que la inflación repunte ya que se terminará la bonificación en el IVA del gas y el gravamen volverá a ser del 21% en las facturas.
Y se encuentra en vigor durante un año la gratuidad en los abonos de Cercanías, Rodalies, trenes de media distancia y líneas estatales de autobús, así como descuentos en Avant.
Del mismo modo, el Gobierno ha vuelto a asumir durante un año el 30% de la tarifa de billetes urbanos e interurbanos, siempre que las autonomías aporten al menos el 20% para alcanzar un descuento mínimo del 50%.
