Hasta el pasado 30 de septiembre, durante este 2022 se habían vendido en la provincia de Tarragona 371 vehículos 100% eléctricos, 21 más que los matriculados durante todo el año pasado, con una cuota de mercado total del 4%. Ante estas cifras, facilitadas por Astave (Associació Empresarial de Tallers de Reparació i Venedors d’Automoció de la Provincia de Tarragona), se puede reaccionar de dos maneras: ver la botella medio llena o medio vacía.
La implantación del vehículo 100% eléctrico aumenta año tras año tanto en nuestra provincia, como a nivel catalán y estatal. Es algo innegable que las cifras así corroboran. Durante el primer semestre de este año, las matriculaciones de coches eléctricos puros en España se doblaron hasta el 54,9%, pero con una cuota de mercado más baja incluso que la de la provincia de Tarragona, con un 3,5%.
Esta es la realidad y casi imposible no cuestionarse si estos números son lo suficientemente buenos para cumplir los puntos más relevantes de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética que afectan directamente al sector del automóvil, como la obligatoriedad de alcanzar un parque de turismos y vehículos comerciales ligeros sin emisiones directas de CO2 en el año 2050, cuando está previsto que los coches de gasolina y diésel no puedan circular.
Antes, hasta el 2040, se adaptarán medidas para que los turismos y vehículos comerciales ligeros no destinados a usos comerciales reduzcan paulatinamente sus emisiones y sean vehículos con emisiones de 0 gramos de CO2/km en 2040. Además, antes de 2023, los municipios de más de 50.000 habitantes deberán adoptar planes de movilidad urbana sostenible que permitan reducir las emisiones, estableciendo zonas de bajas emisiones.
Las diferentes entidades y asociaciones del sector del automóvil consultadas por el Diari coinciden plenamente: las ventas del vehículos 100% eléctrico van aumentado año tras año, pero de manera insuficiente. Emili Beltrán, secretario de Astave, lo tiene muy claro: «el vehículo 100% eléctrico todavía no supone un tanto por ciento significativo sobre las ventas totales».
Beltrán aprovecha para puntualizar que «cuando oímos que se venden más vehículos eléctricos hay que ir con cuidado y diferenciar bien entre los 100% eléctricos, los enchufables de gasolina y diésel (híbridos), y los que no son enchufables, es decir los Mild Hibrid -que arrancan con un motor eléctrico pero después circulan con gasolina o diésel- o los que circulan con un motor eléctrico, pero muy poco, ya que también van con gasolina y diésel». El secretario de Astave hace esta aclaración para incidir en que «en 2050 no se podrá circular ni con gasolina ni con diésel. Y si tiene que ser así lo que convendría es aumentar más las ventas de los 100% eléctricos, que serán los que sí podrán circular».
Desde la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción coinciden bastante con el diagnóstico de Astave. Fuentes de Faconauto comentan que «la venta del coche 100% eléctrico va creciendo, pero muy lentamente y sigue siendo una venta muy residual. En Tarragona estamos algo más del 4% de la cuota total, mientras que la media española es del 3%».
Estas dificultades para arrancar por parte del coche eléctrico puro habrían que achacarlas a dos motivos, según Faconauto. «Por un lado, porque los precios de los vehículos eléctricos están muy alejados de la renta media española. En otros países de referencia, con sus sueldos les es más fácil comprar un coche 100% eléctrico», comentan estas mismas fuentes de esta federación de concesionarios de automoción, que también añaden que «es necesario que bajen los precios. La guerra de Ucrania ha impactado en el precio de los componentes y aún arrastramos un incremento de precios por la pandemia. Todo esto va a provocar que tarden en equipararse los precios de los coches eléctricos con los de combustión».
El problema del precio de estos vehículos también es destacado desde la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC). Su presidente, José López-Tafall, recordaba este pasado verano que «es urgente generar un marco que haga del electrificado una opción atractiva, segura de uso y accesible para el usuario. Por ello desde la asociación defendemos una serie de medidas urgentes que aceleren el desarrollo de infraestructuras de recarga, se agilicen los trámites para la gestión de las ayudas del Moves III, para la instalación de puntos de recarga, y se acorten los plazos en los que los clientes reciben las subvenciones. También es necesaria una incentivación fiscal y que ésta sea percibida de manera positiva por el ciudadano y las empresas, para optar renovar su vehículos por unos electrificados».
Puntos de recarga
López-Tafall pone sobre la mesa una de las principales carencias del vehículo eléctrico: los puntos de recarga. En la provincia de Tarragona, según consta en la página web electromaps, hay 393 puntos de recarga públicos.
Los puntos de recarga en Europa, según recoge Faconauto, son escasos y casi la mitad (48,8%) se encuentran en solo dos países, Alemania y Países Bajos. En España existen solo 245 puntos de recarga por millón de habitantes, representando únicamente el 12,1% de todas las estaciones disponibles en Europa. Para alcanzar los límites establecidos, se deberían instalar en toda la Unión Europea casi 865.000 lugares de recarga de electricidad en los próximos siete años y medio.
Fuentes de Faconauto inciden sobre este tema en que «los puntos de recarga están muy lejos de los que serían suficientes para que un conductor se sienta seguro. Además, un punto de recarga no puede ser uno cualquiera, sino que tiene que ser rápido o ultra rápido, y de estos no hay casi».
La nueva Ley de Cambio Climático y Transición Energética también incide en los puntos de recarga eléctrica, obligando a poner a disposición de la ciudadanía información de estos puntos para vehículos de acceso público. Y también se establece la obligatoriedad de instalar puntos de recarga en las instalaciones de suministro de combustibles y carburantes, en un plazo de 21 meses desde la entrada en vigor de la ley, en mayo del año pasado.
Un 10% del mercado en la UE
La cuota de mercado de coches 100% eléctricos con la que nos movemos en la provincia de Tarragona (4%) y en España (3,5%), contrasta con el 10% a nivel de la Unión Europea. Los coches eléctricos puros siguen escalando posiciones en le mercado europeo, pero con muchas diferencias entre los países más avanzados y los más rezagados.
En general, las matriculaciones de estos vehículos sin emisiones subieron un 28,4% en el primer trimestre de 2022 en comparación con el mismo periodo de 2021.
En cambio, en España las ventas estuvieron muy por encima del conjunto de la UE, doblando las cifras de las comercializaciones de estos vehículos hasta el 54,9% en comparación con el año anterior. Un aumento más que significativo pero que, volviendo al análisis más global, sigue siendo insuficiente si insistimos en que estos coches eléctricos puros suponen el 3,5% del total en nuestro país, frente al 10% en la Unión Europea.
Francia es otro mercado clave que contribuye al desempeño positivo de los vehículos eléctricos, registrando un aumento del 18,6%. En cambio Italia registró una pérdida sustancial del 19,6%, mientras que Alemania registró un ligero descenso del 0,5%.
En cambio, en Europa las ventas de híbridos enchufables (gasolina y diésel) cayeron un 9,6% durante el primer semestre, hasta las 403.217 unidades, pero en comparación con España, las ventas de este tipo de vehículos crecieron un 24,4% en ese mismo periodo, transformándose así, dentro de los mercados europeos más importantes, en el país donde más han subido las comercializaciones de este tipo de automóviles.
Junto a España, los mayores incrementos de matriculaciones de híbridos enchufables se produjeron en Países Bajos, Bélgica, Irlanda y Grecia. Pero a pesar de esto, ya han comenzado los mercados a desacelerarse e incluso bajar en algunos meses.
Más marcas en España
En tan solo cinco años, el número de firmas de coches ha aumentado un 20% por el auge de los coches eléctricos. Según Sumauto, que integra los portales de Autoscout24 y Autocasión, hay 13 fabricantes nuevos que en 2017 no comercializaban ningún modelo. Algunos expertos afirman que un centenar de las nuevas marcas que han aparecido en todo el mundo ha sido gracias a la electrificación y atendiendo a las previsiones de Sumauto, se estima un crecimiento del 29% de las matriculaciones de estas nuevas firmas durante el año 2022 con una amplia oferta de vehículos eléctricos, alcanzando las 30.000 unidades vendidas, y que lleguen a 40.000 unidades en 2023, como Maxus, Polestar, Zhidou o Aiways.
Entre las marcas que aún quedan por aterrizar en España, se espera que lleguen algunas de las enseñas que más vehículos eléctricos venden en el mundo, como la compañía asiática BYD o la americana Lucid Motor, al mismo tiempo que compañías como Apple, Xiaomi o Sony que entrarán al mercado automovilístico tras su asociación con Honda.
Menos emisiones de CO2
En Europa, un coche eléctrico supone un ahorro del 69% en las emisiones de CO2 respecto a un coche equivalente de gasolina, según la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA). La Comisión Europea trabaja en los límites y espera que para 2030 las emisiones se reduzcan un 55%. Sin embargo, aún se necesitaría más infraestructura para conseguirlo.
El verano pasado se produjeron en España unos 4,5 millones de desplazamientos por carretera Sin embargo, si estos se hubiesen realizado con vehículos 100% eléctricos, las emisiones de CO2 habrían caído en 5 millones de toneladas este verano, según un estudio de la plataforma de movilidad CargaTuCoche.