Gran espaldarazo de BBVA Research a las previsiones macroeconómicas del Gobierno. El gabinete de estudios de la entidad ha disparado sus estimaciones hasta mejorar del 1,5% al 2,1% el crecimiento del PIB en 2024, por encima incluso de la previsión del Ejecutivo, que se queda en un 2% y por ahora superaba con creces la del resto de organismos.
Rafael Doménech, responsable de Análisis Económico de la entidad, explicó durante la presentación del informe ‘Situación España’ este miércoles que el descenso de los precios del petróleo desde el pasado septiembre y del gas, la moderación de la inflación y los tipos de interés, una política fiscal «más expansiva de lo esperado», así como la ejecución a un «mejor ritmo» de los fondos Next Generation son las patas sobre las que se asienta esta mejora de las previsiones.
En concreto, la caída del coste de la energía podría añadir hasta 0,4 puntos porcentuales al crecimiento del PIB en 2024. Y por parte de la inflación, que cerrará este año en el 3,1%, casi medio punto por debajo de lo previsto por el organismo en noviembre, y en el 2,3% en 2025.
El primer trimestre, que sirve de «anclaje» para el resto del año está yendo muy bien. Los economistas de BBVA Research avanzaron que el crecimiento del PIB de los tres primeros meses del año rondará el 0,6%.
La herramienta de la Airef que mide el avance de la economía en tiempo real señala que el PIB crece a un ritmo del 0,7% en este momento, superando así el último trimestre de 2023, que sorprendió positivamente con un 0,6% de avance, dos décimas por encima del anterior. Con este impulso, la economía se apuntó un crecimiento del 2,5% en 2023.
Sin embargo, para 2025 la entidad empeora su revisión del 2,5% al 2% por el ajuste en las cuentas públicas de la política fiscal y el «menor dinamismo de la economía de la eurozona», que seguirá arrastrando unas tasas de avance moderadas el año que viene.
Además, desde BBVA Research apuntan a una debilidad de la inversión privada y de la productividad, así como la falta de mano de obra cualificada.
Con respecto al mercado laboral, la entidad observa que permanecen distintas restricciones de oferta que limitarán el avance del empleo. La inmigración y el avance de la tasa de actividad han permitido que la creación de puestos de trabajo continúe. Sin embargo, no parecen haber ayudado a mejorar la productividad.