Ascó y Vandellòs preparan sus municipios para la era postnuclear. Las dos centrales nucleares de Ascó y Vandellòs entraron en funcionamiento en 1984, 1986 y 1988 respectivamente, y con una previsión de cierre por parte del Consejo de Seguridad Nuclear de hasta 2030 y 2032, superando la previsión de los 40 años de funcionamiento con el que fueron diseñados los reactores. Desde su puesta en marcha, la economía de estos territorios ha avanzado muy vinculada al dinamismo de las centrales, no sólo en los municipios donde están instaladas sino en toda su área de influencia.
El impacto del cierre de las centrales comportará la desaparición de una media de 3.000 puestos de trabajo directos e incide en el tejido económico de los municipios que las rodean. Por este motivo y con el fin de promover actuaciones de desarrollo socioeconómico y de transición energética de las zonas afectadas por el impacto ambiental de la producción de energía eléctrica nuclear, en 2020 se creó el Fons de Transició Nuclear, que grava con un 50% sus ingresos relacionados con las actividades de origen nuclear.
El objetivo del Fons es dar respuesta así al impacto del cierre de las nucleares, que incidirá en el tejido económico de municipios del Priorat, Baix Camp, la Terra Alta, la Ribera d’Ebre y el Baix Ebre. Son además territorios que en algunos casos ya sufren despoblación. El Fons está dotado con unos 70 millones anuales.
El pasado mes de enero, el Govern de la Generalitat ya ejecutó el primer pago del Fons Nuclear correspondiente al ejercicio del año 2023. En concreto el Departament d’Empresa i Treball distribuyó 16.564.803,10 euros entre los 97 municipios beneficiarios (174.000 euros cada uno) de zona I y II del Penta de las centrales nucleares que servirán para financiar proyectos de transición energética, promoción económica y generación de puestos de trabajo. En la demarcación son 77 municipios. Se trata de un primer pago, a la espera del definitivo.
Ahora, después de los ayuntamientos, este 2024 más del 50% de los recursos se destinarán a ayudas a proyectos empresariales en convocatorias de la Generalitat, adaptadas a la realidad territorial de los municipios afectados. Se distribuirán los fondos en líneas de ayudas de la Generalitat, principalmente en las subvenciones a inversiones empresariales de alto impacto, en ayudas a nuevas oportunidades de negocio, en ayudas al sector primario y en ayudas al turismo y alojamiento rural. Las líneas de ayudas se publicarán a partir de abril.
También se adaptará la línea de ayuda para detectar e implementar nuevas oportunidades de negocio y para mejorar la competitividad. Además, las convocatorias que actualmente forman parte de la actividad habitual del Departament de Acció Climàtica tendrán recursos adicionales en los territorios de las áreas nucleares para mejorar la competitividad de las explotaciones agrarias. Por último, también se priorizarán proyectos turísticos.
Ascó, la primera en cerrar
Para todo ello, se ofrecerá un acompañamiento a las empresas o emprendedores. Algunos ayuntamientos como el de Móra d’Ebre, por ejemplo, ya han abierto una oficina dinamizadora del Fons de Transició Nuclear.
En el caso del Ayuntamiento de Ascó, el destino del primer pago será para un proyecto de transición ecológica para mejorar la eficiencia energética del vivero de empresas del municipio. El alcalde, Miquel Àngel Ribes, explica al Diari que todavía queda por repartir un segundo anticipo de unos 30 millones de euros, de los cuales 830.000 corresponderán al municipio de Ascó y para este 2024 se ha presupuestado destinarlos a la construcción de nuevas naves en el polígono industrial, para aquellas empresas que quieran implantarse en el territorio.
Ribes explica que también desde el ayuntamiento se están manteniendo reuniones con el sector privado, de diferentes sectores, para proyectos empresariales que se puedan beneficiar de las ayudas a las empresas de este 2024 a través de los Fons e implantarse en Ascó.
Paralelamente, el Ayuntamiento de Ascó trabaja desde hace años en proyectos de diversificación económica para generar más sitios de trabajo en el municipio, optando a proyectos cofinanciados con ENRESA (empresa pública española responsable de la gestión de los residuos radiactivos). Así por ejemplo tienen previsto la construcción de un albergue para potenciar el turismo. «Tenemos un montón de proyectos encima de la mesa. Siempre intentamos optar a las subvenciones para captar fondos externos», apunta el alcalde.
Vandellòs activa líneas de ayuda
Como en el caso de Ascó, el Ayuntamiento de Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant trabaja para preparar el municipio una vez finalice la vida útil de la central nuclear y la localidad deje de recibir los ingresos que tiene en la actualidad.
En el caso de Vandellòs II, su cierre está previsto para 2035, a pesar de la voluntad expresa de la ANAV de seguir operando una vez llegada a esta fecha.
Con este escenario marcado en la agenda, la alcaldesa de la localidad, Assumpció Castellví, explicó al Diari de Tarragona que ya trabajan con «el objetivo de diversificar y ampliar el tejido empresarial» de Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant.
A través de la empresa municipal IDETSA, que forma parte del área de Promoción Económica del consistorio, se ha creado recientemente la oficina de Assistència Fons Nuclear para que las empresas del municipio puedan conseguir líneas de subvención disponibles para mejorar, ampliar y actualizar sus modelos de negocio.
«Queremos atraer nuevas empresas y comercios para diversificar nuestra economía y a la vez, que las que ya forman parte de la localidad no se queden obsoletas y estén al día», afirmó la alcaldesa.
La pieza clave para esta diversificación empresarial y puesta al día de las empresas ya existentes a está en las líneas de subvención de los Fons de Transició Nuclear.
Primer reparto
Una primera partida de unos 174.000€ ya se ha recibido directamente a las arcas municipales mientras que el segundo reparto, previsto para mediados de 2024, será de más de 810.000€. Estas dos liquidaciones serán destinadas al empresariado local.
Las empresas que estén interesadas en poder optar a estas subvenciones tendrán que presentar un proyecto profesional relacionado con la generación de empleo; la transición energética y nuevos modelos de sostenibilidad o la promoción económica. En todo caso, siempre deberán cumplir con los requisitos establecidos por IDETSA.
Finalmente, será una Secretaria Tècnica de la Generalitat quien decidirá qué proyectos tienen o no acceso a esta línea de subvenciones.
El Baix Camp se posiciona
En esta línea de cuestiones, en la próxima reunión del órgano de gobierno se decidirá dónde se ubicará dicha secretaría y quién formará parte de ella. El Ayuntamiento liderado por Castellví ya está trabajando para que se ubique en la comarca y haya, como mínimo, un miembro del Baix Camp.
Entre la línea de ayudas que ya ha impulsado consistorio por valor de un millón de euros, destacan tres grandes grupos. El primero de ellos para las inversiones de alto impacto, en segundo lugar el impulso de proyectos innovadores y estratégicos y, finalmente, los dedicados a la recuperación y comercialización del producto agrario y forestal.
Distribución «injusta»
Castellví explicó que tal y como se está ejecutando este reparto «no es justo ya que salen perdiendo los municipios más cercanos a las centrales nucleares y son los que más se verán afectados».
La alcaldesa dijo que gracias a los ingresos que se reciben por parte de la nuclear, a día de hoy, pueden tener una estructura de personal tan amplia en el consistorio, residencias para personas mayores y centros de día. Del mismo modo, Castellví detalló que todas las asociaciones y entidades de la localidad reciben subvenciones, se tiene equipamientos públicos como los que tienen en la actualidad y servicios a precios muy reducidos.
Diversidad empresarial
Por todo ello, Castellví afirmó que la localidad «tiene 10 años para ponerse las pilas y atraer nuevos negocios actualizar los actuales si se quiere mantener con el nivel de servicios públicos que hay en la actualidad gracias a la nuclear».
Finalmente, la alcaldesa dijo que «es el momento de ser flexible y adaptarse a la diversidad».
Actualmente el consistorio recibe un total de ocho millones de euros de la nuclear, hecho que representa prácticamente un 33% de su presupuesto municipal cifrado en más de 25 millones de euros este 2024.