<iframe src="https://www.googletagmanager.com/ns.html?id=GTM-THKVV39" height="0" width="0" style="display:none;visibility:hidden">
Whatsapp Diari de Tarragona

Para seguir toda la actualidad desde Tarragona, únete al Diari
Diari
Comercial
Nota Legal
  • Síguenos en:

Tarragona y su gran oportunidad con la Copa América de vela

El Nàutic iba a convertirse en la sede de entrenamientos del equipo español juvenil y femenino con el apoyo de Port, Ajuntament y Diputació. Los resultados electorales dejan en el aire la decisión de traer estos Fórmula 1 del mar

11 junio 2023 22:09 | Actualizado a 13 junio 2023 08:32
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Tarragona dispone de la gran oportunidad de vincularse a la Copa América de vela, la competición más antigua del deporte internacional que tendrá a Barcelona como sede de su 37ª edición en verano de 2024 y una de las pruebas que mayor repercusión tiene en todo el planeta con una audiencia que gira entorno a los 1.000 millones de espectadores.

Según ha podido confirmar el Diari, el Reial Club Nàutic de Tarragona iba a convertirse en base de los entrenamientos del equipo español que tomará parte en la Copa América juvenil y femenina -ambas pruebas se disputarán en paralelo con la absoluta- gracias a la financiación del Port, el Ajuntament de Tarragona y la Diputació de Tarragona, que veían con muy buenos ojos dicha posibilidad y tenían muy avanzadas las negociaciones, aunque el resultado de las recientes elecciones municipales ha dejado en el aire esa opción cuando resta tan solo una semana para tomar una decisión final.

Fue a finales de abril cuando al Reial Club Nàutic de Tarragona le surgió la opción de vincularse a la Copa América de la mano del tarraconense David Pino, socio de la entidad y coordinador de la Copa América en el Port de Barcelona.

La apuesta por el Nàutic

A raíz de una conversación con el seleccionador español, el conocido navegante transoceánico Guillermo Altadill, éste le trasladó la posibilidad de buscar como base del equipo nacional un puerto cercano a Barcelona para huir de la frenética actividad que experimentará el Port Vell, base del grueso de los participantes, con el objetivo de llevar a cabo con mayor tranquilidad primero la selección de los tripulantes y posteriormente los entrenamientos.

Pino pensó de inmediato en Tarragona y el Nàutic, cuyas instalaciones convencieron a Altadill y también al responsable del Sailing Team de esta 37th America’s Cup Barcelona, Stewart Hosford. Ambos dieron luz verde al lugar elegido, un espacio junto a la rotonda de entrada al parking del puerto deportivo del Nàutic, con acceso directo al agua, calado suficiente en ese punto para los AC40 que se utilizarán en la prueba y muy cercano a la bocana que da acceso al mar.

El suave viento que suele soplar en la zona, la proximidad del Nàutic con el centro de la ciudad y las conexiones de Tarragona con el AVE y el aeropuerto fueron otros aspectos determinantes.

$!El Port Esportiu de Tarragona era el lugar elegido por el equipo español juvenil y femenino. FOTO. DT

Un millón de euros de canon

Superado ese trámite los actores implicados se sentaron a explorar las fórmulas para afrontar la parte económica y el canon exigido por parte de la organización, que asciende a un millón de euros y estaba previsto que se repartiesen a partes iguales Port de Tarragona, Ajuntament y Diputació (333.000 euros a financiar en dos años; 166.500 anuales).

En una primera reunión celebrada el 22 de abril el Port fue quien primero dio el sí a través de su presidente, Saül Garreta, además de comprometerse a asumir los costes que implicaría habilitar la zona preparada como base náutica; la Diputació también veía con buenos ojos la propuesta (asistió la vicepresidenta del Patronat de Turisme de la Diputació, Camí Mendoza); e igualmente gustaba al Ajuntament, que supervisó el proyecto con el entonces alcalde Pau Ricomà a la cabeza y el concejal de Hisenda, Jordi Fortuny.

A finales de mayo hubo una segunda reunión en la que de nuevo participaron el vocal de relaciones institucionales del Reial Club Nàutic Tarragona, David Pino -padre- y el director general, Xavier Farré, con los mismos responsables del consistorio. Se avanzó, aunque sin poder cerrarse el acuerdo a la espera de los resultados electorales.

El cambio de gobierno en el consistorio y en la Diputació mantiene ahora mismo en punto muerto las negociaciones, aunque el alcalde electo de Tarragona, Rubén Viñuales, y dos de las personas claves de su equipo, Montse Adan y Berni Alvarez, ya conocen la propuesta para ser base náutica de la Copa América, después de un primer encuentro con los directivos del Nàutic, y la urgencia para dar una respuesta definitiva antes de que sea demasiado tarde.

Convertirse en sede posibilitaría la presencia en Tarragona, entre los meses de septiembre de 2023 y junio de 2024, de un equipo inicial de unas 100 personas que se iría reduciendo hasta las 40 una vez realizada la selección definitiva de los tripulantes (cada barco contará con cuatro titulares y cuatro suplentes). Los entrenamientos se celebrarían frente a la playa del Miracle aunque las regatas se celebrarían en Barcelona junto con la American Cup’s absoluta en la que el team Emirates New Zealand defenderá el título que conquistó en la pasada edición.

La gran contraprestación sería el impacto mediático que tiene esta competición, más aún tratándose del equipo español, y de la circunstancia que sus barcos lucirían el logo e inscripciones de Tarragona y Costa Daurada en las velas.

La propuesta, además, encajaría perfectamente dentro del proyecto Tarragona Port Blue Hub, vinculado a iniciativas de Economía Azul y en este caso de innovación náutica, que arrrancará a partir de este verano.

Un barco que alcanza los 60 km/h

El AC40 es el novedoso barco con el que el equipo español entrenaría en Tarragona y el que se utilizará por vez primera en esta inédita Copa América juvenil y femenina. Se trata de un monocasco con foiling, una versión reducida de 40 pies de la clase AC75 que utilizarán además para sus entrenamientos los equipos de la competición absoluta, considerados como los Fórmula 1 del mar.

Utiliza velas de proa autovirantes y molinos que reemplazan la energía de la batería. Lo tripulan cuatro personas: dos timoneles y dos trimmers. Un sistema de control de pioto automático mantiene un vuelo estable. Alcanza entre 26 y 30 nudos, unos 60 kilómetros por hora.

En esta Youth & Puig Women´s American Cup’s participarán los seis equipos inscritos en la prueba absoluta más otros seis invitados, entre los que se encuentra España.

Comentarios
Multimedia Diari