En la primera fase de la Minicopa Endesa, que se celebra en Tarragona desde este pasado viernes y que este domingo pone su broche final, hay dos jugadores que juegan como en casa, porque en realidad lo están. Marc Martínez y Yoel Boada son dos jugadores que están causando sensación en las filas del Lleida, un equipo que por primera vez en su historia disputa la Minicopa Endesa y lo está haciendo a un gran nivel.
Martínez y Boada tienen una curiosa historia. Ambos son jugadores federativamente del Preferente del Ibersol CBT. Los dos están teniendo la oportunidad de disputar la Minicopa gracias a la invitación del equipo ilerdense para formar parte de su equipo. Las buenas relaciones entre ambas entidades han permitido que dos de las grandes promesas del baloncesto de Tarragona demuestren dotes y disfruten de una experiencia única para cualquier niños. Los dos talentos tarraconenses están firmando un torneo emocionante, reivindicando que la cantera del CBT tiene mucho potencial y se trabaja a destajo en él. En el Serrallo se mima a unos niños y niñas que están preparados porque poseen calidad y herramientas para jugar en contextos muy exigentes.
El debut brutal de Marc Martínez
Marc Martínez luce el dorsal número 9 y es un espigado interior que tiene muchos puntos en sus manos. A eso le une una intensidad bajo el aro que le permite capturar muchos rebotes. En su debut ante el UCAM Murcia del pasado viernes logró 19 puntos, 15 rebotes y dos asistencias para un total de 31 créditos de valoración.
Boada es un jugador exterior con un gran manejo de bola que es capaz de meter muchos puntos a la vez que repartir mucho juego. Un niño con mucho talento que también firmó un estreno impecable ante el UCAM. En su caso, logró 24 puntos, 13 rebotes y una asistencia para un total de 22 créditos de valoración.
Derrota ante Unicaja y victoria ante Breogán
El sábado también fue un buen día para los dos tarraconenses. Eso sí, no pudieron evitar la derrota ante un Unicaja de Málaga al que le dieron guerra, pero no pudieron frenar. Eso sí, los dos volvieron a ser los mejores de su equipo. Martínez anotó 17 puntos y capturó 14 rebotes para un total de 20 de valoración. Boada, por su parte, sumó 13 puntos y siete rebotes para un total de 10 de valoración.
Ya por la tarde, el Lleida se midió al Breogán en el último duelo de la fase de grupos. Un choque en el que los ilerdenses sumaron su segunda victoria que les valió para meterse en las finales por los últimos dos billetes que se celebran este domingo y en las que se medirán a Casademont Zaragoza.