Al Reus prácticamente se le ha agotado el colchón de puntos con respecto al descenso y precisa de un éxito esta tarde para evitar líos y problemas. Le visita el Lorca, colista del campeonato y ya muy alejado de la esperanza, aunque la partida todavía le ofrece una vida más. La del milagro. A veces posible en el fútbol. En esas condiciones se presenta el rival murciano en el Estadi, con histórico Fabri, el nuevo técnico, manejando el vestuario. Con 16 puntos, el Lorca duerme a 13 de la permanencia y a 14 del Reus. Distancia con apariencia sideral, aunque no definitiva, por el momento, en esa pelea.
El Reus necesitará gestionar su presión y la del rival. Esquivar la ansiedad y dibujar un partido cerebral. Sólo así lo acabará con éxito. «No vamos a ganarlo en el minuto 20. Sólo lo haremos desde la tranquilidad», confirmó Garai en rueda de prensa. Al técnico le han llovido buenas noticias desde la enfermería. Se recuperan Querol y Miramón para la cita. También volverá al once Yoda, ausente en Soria por una presunta molestia muscular. Misteriosa porque nadie había avisado antes. Su no presencia en Los Pajaritos despertó muchas críticas del entorno. Había una coartada.
Yoda compartirá responsabilidad ofensiva, presumiblemente, con Fran y Máyor, supervivientes tras la derrota en Numancia. Otra de las grandes novedades del Reus puede situarse en la figura de Juan Domínguez. En centrocampista gallego no actúa desde la victoria en Tarragona. Ha pasado casi dos semanas con problemas gástricos, aunque en los últimos días ya se ha ejercitado con normalidad con el grupo.
El ambiente
Garai aprovechó la rueda de prensa previa al partido para mandar un mensaje hacia los aficionados del CF Reus. «Durante la temporada, por varios motivos, la afluencia de gente no ha sido la que esperábamos y, ante un partido importante como contra el Lorca, los chicos necesitan ese apoyo, porque nos encontramos en un momento muy importante de la temporada. Creo que todos ya nos jugamos mucho».
El Lorca presentó este mismo jueves a sus dos últimas incorporaciones del mercado invernal para intentar esa salvación épica. Se trata de Gomelt y Brown, dos futbolistas desconocidos en la Segunda División que pretenden dar un salto de calidad a su equipo. Fabri debe poner toda la carne en el asador en el Estadi, porque su Lorca pide a gritos la suma de puntos.