El 11 de junio de 2022 fue el día que el Nàstic más cerca ha estado de regresar a Segunda División desde que bajase en la temporada 2018/19. El Estadio Balaídos dibujaba un escenario idílico. Más de 600 aficionados se desplazaron a Vigo ilusionados con vivir un retorno esperado al fútbol profesional.
El delantero del Villarreal B Nicholas Jackson, actual ‘9’ del Chelsea de Pochettino, logró un doblete que convirtió esa tarde en una pesadilla para el Nàstic. Vigo recogía el testigo de Llagostera como escenario cruel para los tarraconenses.
Un año y medio después, el Nàstic vuelve a la ciudad gallega. Solo cinco miembros de la plantilla quedan de entre los que estuvieron esa tarde en en Balaídos: Pol Domingo, Pablo Fernández y Joan Oriol, que fueron titulares en el partido; y Marc Montalvo y Dani Parra que viajaron en la convocatoria. Además, Dani Vidal también formaba parte del cuerpo técnico, como segundo de Raül Agné y también Manuel Oliva, entrenador de porteros. Todos ellos vuelven a Vigo con la intención de sacarse esa espinita que quedó clavada.
Las circunstancias del regreso son distintas. No será en Balaídos, sino en el Municipal de Barreiro. Un cambio de feudo y un climatología ruda, está prevista lluvia a la hora del partido, las 15.45 h) que obligará al cuadro grana a calibrar bien los matices del plan de partido para regresar con botín.
El rival, tampoco será el Villarreal B, sino otro filial, el Celta Fortuna, con una filosofía de juego muy parecida. Alegría, atrevimiento y una enorme calidad técnica individual. Un equipo que lidera el grupo 1 de Primera RFEF a través de su capacidad ofensiva (33 goles a favor) y que medirá el buen estado de forma del Nàstic.
El conjunto dirigido por Dani Vidal ha vuelto a coger una buena racha de victorias -suma tres triunfos consecutivos- y espera ampliarla incluso ante el rival más fiero posible. Un Celta Fortuna que también llega en plena forma, con cuatro duelos consecutivos ganados.
Seis puntos separan a los dos conjuntos. Una distancia que hace que el choque cobre determinada importancia. Si el Nàstic recorta la diferencia a tres, pondría al rojo vivo la lucha por el ascenso directo. Si los vigueses se llevan los tres puntos pondrían mucha tierra de por medio. Como apuntó Dani Vidal en la previa, en ningún caso será definitivo, con toda la segunda vuelta aún por jugar.
Y es que el duelo ante el filial del Celta supone cerrar una primera vuelta notable del cuadro tarraconense. Mucho mejor que la de las dos temporadas anteriores en Primera RFEF.
Baja de Gorka Santamaria
El entrenador del Nàstic repitió once por segunda vez esta temporada ante la UE Cornellà. Un equipo que parece darle la tranquilidad de inicio y que podría repetir esta tarde. No estará Gorka, que salió en la segunda parte frente al Cornellà, porque recayó de la lesión fibrilar en el isquiotibial derecho que ya le hizo perderse varios partidos antes de acabar el 2023.
La zaga grana estará muy exigida, como avanzó Vidal en la rueda de prensa previa al choque y tendrán que vigilar especialmente el capitán Joan Oriol y la pareja de centrales Nacho y Trigueros. Si alguno de ellos ve una amarilla se perderá el próximo duelo en casa ante el Lugo.
