Gimnàstic y Ayuntamiento de Tarragona ultiman los detalles para que el club grana siga en el Nou Estadi durante medio siglo más. Ambas partes negocian la ampliación del acuerdo desde hace meses y, según ha podido contrastar el Diari, el pacto ya está prácticamente cerrado, hasta el punto de que la previsión es que la nueva concesión se apruebe en el pleno municipal del próximo mes de julio.
El permiso de uso del campo de fútbol finaliza en 2025 y su ampliación era una exigencia de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para que el conjunto grana pudiera ascender a Segunda División A. La segunda máxima competición obliga tener un estadio en propiedad o, en su defecto, contar con una concesión administrativa en vigor a medio o largo plazo, según expuso hace meses la LFP a la entidad con sede en la Partida de la Budellera.
Por ello, club y consistorio iniciaron los contactos hace tiempo, con el fin de llegar a un acuerdo para la posible inscripción del Nàstic en Segunda A de cara a la próxima temporada. Ahora, y pese a que el Nàstic se queda finalmente en la categoría de bronce, los trámites ya están listos para dar el OK definitivo en pocas semanas.
Campo municipal desde 1994
El Nou Estadi se inauguró en 1972 y es propiedad del Ayuntamiento desde marzo del 1994. Pocos meses después, ya en 1995, el consistorio otorgó una concesión al Gimnàstic para poder usar el emplazamiento durante 30 años. Esta habilitación administrativa expira en pocos meses, y es por ello que ahora se renovará por el máximo que permite la legislación actual: 50 años. Esto quiere decir que la entidad tendrá permiso para utilizar el recinto hasta el año 2075. «El campo es municipal y renovaremos la concesión. La vinculación entre el Club Gimnàstic y el Ayuntamiento siempre será una realidad», indica el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales (PSC).
El acuerdo establece que el Gimnàstic no paga canon, si bien sí que se hace cargo de los gastos de mantenimiento y del coste de los servicios de agua, luz o gas.
«Debe tener autonomía total»
Otro de los aspectos que está sobre la mesa es la implicación del Ayuntamiento en las acciones de la Sociedad Anónima Deportiva (SAD) del Nàstic. Después de llegar a contar hasta con un 50% hace años, a día de hoy el consistorio maneja un 13,99%: 9.704 participaciones.
La reducción es debida a diferentes ampliaciones de capital que realizó el club y en las que el Ayuntamiento no participó. «Nuestra voluntad es seguir reduciendo esta participación. El Ayuntamiento siempre estará junto al Nàstic, pero nuestra presencia debe ser testimonial. De hecho, hace años que no asistimos ni a los consejos de administración porque el club debe tener una autonomía total», apunta el alcalde Viñuales en declaraciones a este periódico.
Sin embargo, el futuro de las acciones no genera consenso en el Saló de Plens. Mientras que Jordi Sendra (Junts) considera que las participaciones «deben mantenerse», Maria Mercè Martorell (PP) afirma que estas deben venderse «cuando pueda recuperarse la inversión que se hizo en su momento». Hace meses, ECP también apostó por vender las acciones. Asimismo, Maria Roig (ERC) no se moja y se limita a afirmar que «cualquier decisión debe tomarse de forma consensuada, pensando en el bien del club y de la ciudad».