Marc Fernández ha querido salir al paso de las críticas este miércoles en la red social ‘X’. El jugador del Nàstic ha lamentado que se ponga en cuestión su profesionalidad por abandonar el terreno de juego antes de finalizar el partido ante el Sestao River del pasado domingo y no quedarse hasta el pitido final.
El barcelonés, que entró en el segundo tiempo, se marchó al vestuario minutos antes de acabar el duelo. El motivo fue una lesión en el isquiotibial que se produjo en el mano a mano que tuvo ante el portero visitante. Una acción que finalizó, lesionado, con un tiro a puerta vacía que rechazó un defensor con la rodilla.
Inmediatamente después de la jugada, que pudo dar los tres puntos al Nàstic ante el Sestao, el jugador grana se retiró del terreno de juego cuando el árbitro todavía no había pitado el final del encuentro. Una reacción que algunos aficionados han cuestionado.
Ante esta situación, Marc Fernández ha querido responder y explicar el dolor que le produjo la lesión. Hasta tal punto que «al acabar el partido me tienen que ayudar a bajar las escaleras, quitarme las botas, porque no puedo ni doblar la pierna».
El extremo tampoco ha querido ir más allá y ha pedido a la afición que ayude para «salir de esta racha». Marc Fernández, autocrítico con su falta de gol, también ha querido transmitir «lo unido y las ganas que tiene este equipo, pocas veces he vivido algo así». Una declaración importante, teniendo en cuenta el historial del futbolista con partidos en Segunda e incluso Primera División.
El futbolista está a la espera de las pruebas médicas que determinen el alcance de la lesión. Aunque todo apunta a que se perderá, como mínimo, la próxima jornada frente al Real Unión de Irún, al tratarse de una lesión muscular.
