Otra buena prueba de fuego la completada por el Nàstic frente al Valencia en un encuentro a puerta cerrada que se disputó en el Antonio Puchades. Fue un encuentro en el que los granas volvieron a dejar claro que el verano sirve para medir sensaciones y trabajar sensaciones antes que para valorar resultados.
Enfrente había todo un Valencia, por lo que la derrota queda en mera anécdota.
Los once elegidos por Dani fueron: Parra, Tirlea, Nacho, Trigueros, Oriol, Sanz, Martínez, Escudero, Rodríguez, Marc Álvarez y Marc Fernández. Un once con probaturas en el que no salió ningún delantero puro y que tuvo a los Marc en el frente ofensivo.
«Nos ha tocado un partido de defender mucho y de no tener la pelota, pero es lo normal si juegas contra un equipo de superior categoría»
Dani Vidal, entrenador del Nàstic
El encuentro disputado por los tarraconenses fue muy bueno. Tanto, que incluso se adelantaron en el marcador. Fue en el minuto 26 en una bonita jugada ofensiva en la que se juntaron dos de esos futbolistas llamados a marcar las diferencias en el frente de ataque esta temporada. Escudero recibió entre líneas e hizo lo que mejor sabe hacer.
Se marchó de su par, condujo por dentro y filtró una bonita pelota dentro del área que recogió Marc Fernández para controlar y embocar a gol con un colocado disparo. Por dentro es más peligroso que por fuera y lo volvió a demostrar.
Lamentablemente no pudieron los granas sostener en resultado a favor. Primero vieron como Hugo González empataba en el 41’ con un cabezazo que superaba a Dani Parra. En la segunda mitad, los granas resistieron el empate durante muchos minutos, pero finalmente Almeida marcaba un bonito gol desde la frontal en el 84’ que le daba la victoria a los de Rubén Baraja.
«Era un equipo de superior categoría y no se ha notado sobre el campo. Estamos en una buena línea y el equipo está trabajando bien»
En la segunda parte hubo minutos para Dufur, Domingo, Gorostidi, Montalvo, Pochettino, Pablo, Jardí, Concha y Quirós. Durante la segunda mitad entraron tres canteranos como son Urbina y Querol y en la recta final tuvo minutos Grabulosa, hijo del exmitíco jugador grana.
Tras este encuentro, el Nàstic ya piensa en el siguiente enfrentamiento que también será de mucha exigencia. En este caso será el próximo sábado a partir de las 20.00 horas en el Nou Estadi Costa Daurada ante el Real Zaragoza.