El Reus Deportiu anunció las marchas de Sergi Aragonès (FC Barcelona) y David Gelmà (Caldes) antes del final de la temporada. Con esos dos movimientos, muchos pensaron que se venía un verano movido en cuanto al mercado de fichajes en el Baix Camp. No estaban en lo cierto. En las oficinas rojinegras rápidamente se trasladó un mensaje de tranquilidad y confianza en la plantilla absoluta. Sobraban argumentos para seguir creyendo en que aquel equipo no necesitaba fichajes. Solo necesitaba continuidad.
Es por eso que ya se lleva un mes y medio de mercado y todavía no ha habido movimientos en cuanto al capítulo de altas en las oficinas rojinegras. De hecho, y salvo sorpresa, nos lo va a haber. La apuesta por no fichar sigue firme y Jordi García ha aceptado de buen gusto esa estrategia. Sabe que las marchas de Sergi Aragonès y David Gelmà acortarán la rotación, pero que también es una oportunidad para hacer crecer a otros jugadores que esta temporada ya han comenzado a dar un paso adelante.
De hecho, el único movimiento que ha realizado el Reus en lo que va de estío es una renovación. No una cualquiera. La entidad del Baix Camp ha conseguido atar a su gran perla para las próximas tres temporadas. Guillem Jansà ha renovado hasta el 30 de junio de 2027 en una ampliación de contrato clave para el futuro, pero también por el presente. Lo es porque Jordi García ya situó a Jansà en la rotación del primer equipo el curso pasado y para esta temporada quiere todavía darle más galones. Considera que está preparado para el reto y en la entidad rojinegra se frotan las manos porque son conscientes de que tienen a un jugador con unas condiciones dominantes.
Él no está solo en ese proyecto de juventud rebelde. A su lado contará con Diego Rojas, Ferran Giménez y Nil Viña, otros tres canteranos que el año pasado firmaron actuaciones deslumbrantes con el primer equipo. El Reus ha conseguido incrustar a cuatro canteranos en la rotación del primer equipo con suma naturalidad. Es lo que tiene el talento, se abre paso, causando asombro, pero sin generar estridencias negativas.
A estas jóvenes piezas hay que añadirle que la plantilla cuenta con jugadores diferenciales y con experiencia en el vértigo. Càndid Ballart, Joan Salvat, Marc Julià, Martí Casas, Arnay Canal y Maxi Oruste permiten ofrecer un ecosistema competitivo a estos jugadores tan prometedores.
El Reus dispone de un quinteto de altos vuelos, pero también de una rotación que permite siempre mantener un nivel competitivo en la pista. Algo que resulta clave en una temporada que arrancará con la Supercopa de España y que luego colocará al Reus en dos ocasiones de manera simultánea, disputando la OK Liga y la Champions League, en la que los rojinegros han quedado encuadrados con Follonica, Voltregà y Germania Herringen en una fase previa que deberán conquistar para meterse en la segunda ronda de la competición continental.
