El racismo es una lacra que está presente en el fútbol español como se demuestra de manera casi semanal con diferentes casos que van desde la élite hasta el fútbol amateur. Vinicius, futbolista del Real Madrid, ha sido el jugador que más ha denunciado esta situación, pero hoy mismo han habido hasta dos casos más de racismo en los campos españoles.
Acuña, jugador del Sevilla, ha sido insultado por algunos aficionados del Getafe que le han llamado «mono». A Quique Sánchez Flores, técnico del Sevilla, también le han gritado algunos aficionados la palabra «gitano» en un claro tono racista.
Pues bien, solo dos horas después le ha tocado vivir una situación incomprensible a Cheikh Sarr. El que fuera portero del Juvenil A del Nàstic y del primer equipo ha sido víctima de estos insultos en Sestao. El actual guardameta del Rayo Majadahonda ha sido expulsado tras encararse con la afición rival e incluso meterse en la grada tras reaccionar con contundencia a un insulto racista.
El partido se ha suspendido en Las Llanas y el equipo visitante se niega a volver a jugar.