La destitución de Thomas Tuchel con la llegada de Graham Potter como nuevo entrenador del Chelsea, representa un importante cambio en la carrera futbolistica de Bruno Saltor. El técnico de Móra d’Ebre formará parte del equipo técnico del club londinense, que con el fichaje de Potter ha experimentado un importante cambio en su organigrama. Con Potter, junto con Bruno, también se han incorporado Billy Reid, Bjorn Hambert, el entrenador de porteros Bernd Roberts y Kile Macaulay, que realizará tareas de scouting.
Bruno Saltor llegó a ser un auténtico símbolo del Brighton después de estar siete años en el primer equipo y jugar 225 partidos oficiales. Tras retirarse en el 2019 se quedó como entrenador en la entidad y hasta hace poco era uno de los asistentes de Graham Potter en el primer equipo del cuadro de los Seagulls.
De esta forma, también habrá representación española en el cuerpo técnico del Chelsea, un equipo que cuenta en la plantilla cuenta con tres futbolistas nacionales: Kepa Arrizabalaga, César Azpilicueta y Marc Cucurella, también recién llegado del Brighton.
Bruno se incorporó al club de la costa sur en 2012 y tuvo un papel importante en su ascenso a la Premier League en 2017, formando un estrecho vínculo con los aficionados durante casi una década de servicio.
Bruno Saltor jugó en el Espanyol B, Gimnàstic de Tarragona, Lleida y Almería, y con casi 32 años y escasos minutos en el Valencia, enfilaba el final de su carrera, que se revitalizó con su fichaje por el Brighton de Championship -segunda división inglesa-, en verano de 2012. Tras su retirada pasó inmediatamente del campo al banquillo, recomendado por Graham Potter como ayudante del técnico inglés. Y tan esencial ha sido para el nuevo entrenador del Chelsea que se le ha llevado también como asistente.
En su escrito de despedida, ha mostrado su agradecimiento y cariño a Brighton y sus seguidores: «Tengo el corazón roto, probablemente como algunos de vosotros, y la misma sensación que cuando salí de casa a los 14 años, lo que me han dado jugadores, personal del club y del campo de entrenamiento, aficionados y la comunidad es inolvidable, muchas gracias». Al mismo tiempo recordaba los buenos momentos vividos, «lo que me han demostrado estos 10 años es que el fútbol es más de 90 minutos. De todas las cosas sin importancia, el fútbol es lo más importante. He dado mi corazón y alma por este club y me gustaría pensar que he ayudado a dejar el Brighton & Hove Albion en un sitio mejor que cuando llegué».
