El libro de Ayla. 1- La runa de los dos mundos
Autora: Séverine de la Croix
Editorial: Errata Naturae
Precio: 24 €
Ayla se quedó huérfana al nacer cuando acusaron de bruja a su madre y ha vivido, desde entonces, al cuidado de una familia que la ha tratado como a una más. Cuando el señor de esas tierras la ve montando en el bosque con su amigo, el caballo dorado Temis, se ve obligada a huir de su hogar, por miedo a ser descubierta y acabar como su madre ya que... ella no es humana. Su origen es mogái, una de las criaturas mágicas (entre las que se encuentran las sirenas, los elfos, las hadas y los korrigans) que los hijos de Beatha (la Vida) crearon y que ella adjudicó al cuidado de la Tierra, tras construirla. Según cuenta la leyenda, cada especie vigilaría a una parte de sus habitantes: los mogáis, a los animales terrestres; los elfos, a los seres vegetales; los korrigans, a los espíritus; las sirenas, a los marinos; y las hadas, a los voladores. Sin embargo, a medida que los humanos se vuelven egoístas y mezquinos, las criaturas mágicas se van alejando de ellos y ahora buscan regresar a las tierras de Tilgivelse, “el reino paralelo al nuestro al que se dirigen las almas que han alcanzado la iluminación”. Y, aunque animan a Ayla a seguirles, ella decide quedarse en la Tierra para salvar a la familia humana que ha cuidado de ella desde su nacimiento y que ahora se encuentra en peligro, a pesar de que eso pueda representar su propio final.
Con un punto legendario, ambientada en plena época del feudalismo, esta aventura gráfica se convierte en un reclamo de la fuerza femenina y de la magia. La autora, Séverine de la Croix, así lo explica en las últimas páginas, donde desvela cómo surgió la idea de crear este complejo y maravilloso mundo que trata de recuperar la magia que algunos se empecinaron en eliminar. De la Croix recupera una ristra de criaturas mágicas con tótems que les hacen formar parte de nuestro mundo sin que los veamos siquiera, y que son responsables del equilibrio entre todas las especies que conocemos... ¿No es una fantasía extraordinaria?
Las ilustraciones creadas por Violette Grabski dan cobijo a esa intención de devolver a la magia la relevancia que le corresponde, y logra dulcificar, como bien pretende la autora, los hechos terribles que en realidad describen: la guerra sembrada siempre contra lo desconocido. Coloreadas con poca saturación, parecen extractos de un sueño que por fin toma realidad y que, ojalá, siga dando a luz muchas novelas gráficas más. Un comic ideal para lectores de a partir de 10 u 11 años que quieran conocer un poco mejor el sentido de la magia.