Si estos días se encuentran por las calles de Tarragona al actor y cómico David Fernández (Barcelona, 1970), conocido ‘mundialmente’ por su personaje eurovisivo de Chiquilicuatre, no piensen que tienen alucinaciones.
Nos hemos ido de rodaje con él y hay que decir que David es un tío majo, de los que saluda a toda la gente que se le acerca (y no es poca) y en todo momento hace un gag, una broma y regala besos y abrazos. Nos hemos sentado a tomar un ‘Chartreusito’ (por eso de hacer tarragonisme) en El Serrallo y, además de reírnos muchísimo, nos ha contado cuál es su historia con nuestra ciudad y cómo es esta nueva aventura televisiva.
Le pillamos paseando por El Serrallo, hablando con su gente y probando un delicioso romesco.
Así es, un trabajo durísimo (se ríe); ir en barquita, comer bien, hablar con gente maravillosa del barrio... Este programa me está dando muchas alegrías y recorrer Catalunya para conocer a sus gentes, su historia, sus monumentos... es maravilloso.
Cuéntenos cómo será este nuevo programa.
Se llama De Carrer y se emitirá en TVE Catalunya y lo que hago es eso, pasearme, hablar, escuchar las bonitas historias de los vecinos y vecinas y descubrir rincones y lugares que os van a encantar.
Su primer punto de encuentro ha sido el barrio pescador y marítimo de El Serrallo. ¿Qué ha hecho por ahí?
Comer y beber (se ríe otra vez, y así toda la entrevista). Pues mira, he conocido a Carme Pedrol, una mujer activista, de las que luchan por el barrio y por su gente; he paseado en la barquita Tarragona Blau de Lluís, Joan Negrié me ha hecho un tour por El Teatret y sus vistas al mar y Quico me ha contado cómo es el mundo de la pesca y lo duro que es trabajar en el mar. ¡Ah! y después de una larga jornada (se ríe), Gerard de L’Àncora me ha cocinado un romesco y otras delicias.
No solo ha estado en El Serrallo. ¿Por dónde se ha paseado más?
Te aseguro que me he convertido en un experto de la Part Alta de Tarragona. He paseado por todas sus calles; Comte, Merceria, Major, Cos del Bou, Baixada Peixateria, Via de l’Imperi Romà y he conocido cosas y gente muy bonita. Es curioso como cada calle tiene su personalidad, sus rincones, su gente querida por todos y otras cosas que no desvelaré. Tenéis que ver el programa.
Los romanos no eran nada tontos y si escogieron Tarraco para que fuera capital del Imperio Romano, por algo sería
¿Qué le ha sorprendido de Tarragona?
Pues que los romanos no eran nada tontos y si escogieron Tarraco para que fuera capital del Imperio Romano, por algo sería. Vieron que era un lugar ideal para establecer sus casas y tanto en el casco antiguo como en otros rincones hay cosas maravillosas.
¿Se ha enamorado de algún rincón en especial?
Tengo que decir que la parte antigua de la ciudad ya la conocía bastante y es espectacular; pero me ha atrapado mucho El Serrallo. Nos hizo un día superbonito y tener el mar tan cerca siempre es un regalo. Nunca había estado en el barrio pescador y ya te digo yo que volveré. Por cierto, repito que comí en L’Àncora a ver si me vuelven a invitar (ríe).
Si le hago concretar todavía un poquito más, ¿alguna tienda, monumento, personaje que le haya gustado especialmente?
Pues sí, la Antigua Casa Corderet de la calle Merceria. Es que flipé con esa cerería del 1751, es espectacular; y como Xavi, su propietario, te cuenta la historia de cada piedra, de las puertas, de la misma calle y que sea una de las tiendas más antiguas de Europa. Me pareció brutal ese lugar, ¡volveré! y le recomiendo a todo el mundo que vaya porque es un lugar mágico.
¿Usted tiene una relación especial y muy bonita con Tarragona?
Así es, porque trabajé muchos años con la gran familia de El Terrat y tengo muchos colegas a los que quiero un montón como Fermí Fernández y Oriol Grau, que ya te digo que son grandes anfitriones de la ciudad porque conocen perfectamente su historia y son unos enamorados. También he venido a hacer teatro con varias obras y es una ciudad muy cercana para mí, pero es verdad que descubrirla así de rodaje, paseando, me ha dado otra perspectiva.
Por cierto, muchísima gente le pide una foto y le recuerda como Chiquilicuatre.
Me continúa sorprendiendo como 15 años después la gente se acuerda tanto. Lo bonito es cuando la gente me ve y automáticamente ya sonríe. Eso para el trabajo de actor y para mi vida personal es muy gratificante.