El Vendrell pierde hasta un 25% de agua por las canalizaciones en alta que llevan el agua desde los depósitos a las tuberías en baja que van a los domicilios.
El Ayuntamiento explica que esas fugas son muy difíciles de detectar. Así por ejemplo la canalización que va por la riera de La Bisbal y que lleva agua del depósito Molí Blanquillo sufre daños cuando hay avenidas por lluvias intensas.
Además están depositadas sobre firmes arenosos que ocultan la fuga y ceden agravando la fragiilidad de una canalizaciones por las que además pasa un agua muy calcárea que colmata las tuberías. Son además canalizaciones muy antiguas. En El Vendrell las más modernas pueden tener 60 años, pero también las hay de un siglo.
Renovación
El concejal Alfons Herrera señala que de manera constante deberán renovarse las canalizaciones que llegan del Molí Blanquillo y que nutren a zonas como el Tancat y el Botafoc, pero requiere una inversión que «ahora no tenemos».
La renovación en las tuberías en baja ya se va haciendo con las obras en calle como en Cristina Baix y Quatre Fonts.
Herrera apuesta por medidas que permitan ahorrar cada gota como se hace con las duchas de la playa. Señala que El Vendrell recibe agua del Ebre y de pozos propios y éstos «en cualquier momento pueden dar problemas» como ya sucede en municipios del Baix Penedès como en Bonastre, Banyeres o Albinyana, donde se pide a los vecinos responsabilidad por el descenso del caudal.
Para intentar asegurar el suministro y las reservas, en el municipio se hará un nuevo depósito en Nou Vendrell ya que el actual presenta deficiencias. Esa obra está en fase de estudio técnico.
Además pretende impulsarse la llamada quinta conexión. En El Vendrell ahora hay cuatro conexiones con el Consorci d’Aigües de Tarragona (CAT) que lleva el agua del Ebre por la zona de costa. La quinta conexión iría por el norte del municipio para conectar la red del Ebre con el depósito principal del Tomoví.
Con ello, en caso de necesidad, todo el suministro de El Vendrell podría ser del CAT si los pozos propios de los que ahora extrae agua el municipio, a veces en exceso afectando al caudal del acuífero, presentan problemas.
Por ello el objetivo es recurrir más al suministro del Ebre, aunque ese agua es más cara. Si el agua de pozos de El Vendrell tiene un coste de 5 céntimos los 1.000 litros (primer tramo), la del CAT es de 50 céntimos. Por ello se pretende alargar la vida útil de los pozos con un consumo responsable.