El Port de Torredembarra es el primer puerto de Catalunya que ha sustituido los muros de hormigón submarinos por arrecifes marinos totalmente ecológicos. Esta transición se ha llevado a cabo gracias al proyecto ‘Puertos de Vida’, desarrollado por la Natural Art Reef Association, ejecutado por el centro de buceo M.Rota Diving y financiado, en su mayor parte, por la Diputació de Tarragona.
El proyecto tiene como objetivo, según explica Max Rota, de M.Rota Diving, «lograr la transición ecológica de los amarrajes en el puerto de Torredembarra mediante la creación de ‘puntos verdes’, que aseguren un patrimonio natural marino más sano y resiliente, y hacerlos visibles, para así sensibilizar y fomentar las buenas prácticas marítimas entre la sociedad y los usuarios de embarcaciones náuticas».
Rota asegura que «hace años que trabajamos como buzos profesionales del puerto y nos hemos dado cuenta que existen ‘guarderías’ de muchísimas especies marinas que pasan sus primeras etapas de vida en los bloques de hormigón que hay bajo el mar». El puerto de Torredembarra, prosigue, «es de aguas muy calmadas, lo que favorece muchísimo a las primeras etapas de las especies porque allí no hay depredadores propios de las zonas rocosas». Entonces, «hemos propuesto la creación de puntos verdes dentro del puerto, los cuales, por un lado fomentan la conservación de las especies marinas que ya existen y, por otro, promueven la sensibilización entre las personas usuarias y la ciudadanía en general».
En este contexto, gracias a ‘Puertos de Vida’, se ha realizado la transición ecológica de los amarrajes del puerto de Torredembarra mediante la creación de 6 ‘puntos verdes’ de estructuras de fondeo ecológico. Se trata de biotopos compuestos casi al 100% de carbonato cálcico que se han instalado a una profundidad de entre 4 y 7 y que suponen una alternativa a los métodos de balizamiento convencionales, promoviendo la colonización de especies y la educación y sensibilización públicas.
Aguas limpias
Más allá de fomentar la crianza de especies marinas, ‘Puertos de Vida’ también busca cambiar la visión de los puertos en cuanto a la creencia que se tiene sobre sus aguas. «No son contaminantes ni estancadas», explica Max Rota, «al contrario, son aguas calmadas y, si se ven sucias, es por el mal comportamiento de sus usuarios». Así, se han instalado tres carteles informativos «que recogen los resultados principales del proyecto y ofrecen recomendaciones para hacer un uso responsable de las instalaciones portuarias».