A los pies del templo del Gran Jaguar, en Tikal, Guatemala. Uno de los mayores yacimientos arqueológicos y centros urbanos de la civilización maya. Tikal significa lugar de las voces.
Hasta ese emblemático paraje declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979 la colla Dansaires del Penedès ha llevado la sardana. Hace años que los sardanistas de El Vendrell recorren el mundo para llevar el baile a los lugares más emblemáticos.
Ahora han visitado Guatemala donde también han bailado junto a emblemática iglesia de la Merced en la ciudad de la Antigua Guatemala y que ha resistido varios terremotos de intensidad. Casi con la misma fortaleza que la colla resiste para mantener viva la tradición sardanista.
Dansaires del Penedès es la segunda colla sardanista en activo con más historia en Catalunya. Fundada en 1946, en la década de los 60 comenzó sus viajes por todo el mundo.
Naciones Unidas
Europa, Asia, Africa.... Y en los lugares más emblemáticos como la sede de las Naciones Unidas en Nueva York al 2004. Un privilegio exclusivo reservado a muy pocos. Sólo figuras como Pau Casals han podido tener este honor.
Dansaires del Penedès también ha llevado la sardana a las cataratas de Iguazú, a los pies del Cristo Corcovado de Río de Janeiro o lo más alto del Burg Kalifa, el edificio más alto de Dubai.
La colla ha bailado en la Ciudad Perdida, frente al Taj Mahal de India, en el Vaticano, Sudáfrica, Thailandia, Israel, Rusia o Emiratos Árabes y en Samarcanda, en el corazón de la Ruta de la Seda.
Joan Morros, presidente de la entidad, destaca como emocional el bailar en la sede de las Naciones Unidas y el haberlo hecho ante dos papas: Juan Pablo II y Francisco.
La entidad también ha llevado la sardanas a las escuelas del Baix Pendès con cursillos para los alumnos y ha realizado programas de radio en las emisoras locales.
Hace 20 años en Catalunya había unas 400 collas sardanistas. Hoy son unas pocas decenas y Dansaires del Penedès sigue con sus rotllanas y llevando el nombre de Catalunya por todo el mundo.
