El pleno municipal de Roda de Berà aprobó la modificación de las ordenanzas fiscales para el ejercicio 2025. De las treinta y tres ordenanzas, el incremento afecta al precio del agua de los barrios que se alcanzan de los pozos municipales, a la tasa de la recogida de la basura, y al impuesto sobre bienes inmuebles. En relación a este último, el incremento se ajusta a la subida del IPC, con un 2,5% de aumento, que supondrá sumar menos de doce euros anuales de media al recibo del IBI.
Esta subida pretende sufragar el incremento en los costes prevista para el próximo año en los servicios y productos que el Ayuntamiento tiene que adquirir o contratar y para abordar inversiones.
En cuanto a la tasa de suministro de agua, los incrementos previstos afectan al precio del agua de la zona norte del municipio, procedente de los pozos municipales, por lo que el aumento será mínimo en el recibo de las familias que hacen un uso responsable. En cambio, se establecen precios más altos para los tramos de consumo más elevados, con un sistema de tarifas escalonadas que incentive los consumidores a reducir su consumo. El ayuntamiento confía en que cobrar más por el agua que exceda un umbral razonable estimulará los usos más responsables.
«Familias y comercios que gestionen mejor sus residuos verán reducido su recibo»
El incremento de la tasa de recogida, tratamiento y eliminación de residuos es de un 19% lineal. Según el ayuntamiento, responde a la normativa europea, que obliga a que la recaudación derivada de una tasa cubra por completo el coste del servicio, sin subvenciones ni ayudas.
El equipo de Gobierno asegura que elaborará un reglamento que permita que «esta tasa sea más justa. Aquellas familias y comercios que gestionen correctamente sus residuos vean reducido su recibo, frente a aquellos que no lo hacen».
