PortAventura podría perder un 50% de sus ingresos este 2020 para culpa de la crisis del coronavirus y poner en riesgo su rentabilidad y liquidez, según la agencia de rating Moody’s, que ayer mismo decidía bajar la nota para el perfil de crédito del parque de atracciones de B2 a Caa1.
Según Moody’s, la crisis del coronavirus tendrá «un impacto significativo negativo en la liquidez y las finanzas de PortAventura». Aunque la agencia de rating admite que la situación derivada del coronavirus «no tiene precedentes», considera que PortAventura es especialmente «vulnerable» porque tiene una «única localización» y «una elevada estacionalidad».
Moody’s reconoce que PortAventura había mejorado durante el 2019 gracias a la estrategia de tickets de múltiples días y la apertura de nuevos hoteles como el Colorado Creek.
Con todo, ahora la agencia de rating asume que el parque deberá estar cerrado, como mínimo, hasta finales del segundo trimestre, y no notará una «lenta recuperación en las visitas» hasta el tercero. De hecho, Moody’s tampoco descarta que el parque tenga que estar cerrado toda la temporada de verano, escenario que considera que afectaría «gravemente» el perfil de liquidez del parque y provocaría una «estructura de capital insostenible».
El ERTE
Moody’s destaca que PortAventura ya ha iniciado diversas acciones -entre ellas, un ERTE- para rebajar los costes fijos, que calcula que se pueden disminuir entre un 15 y un 20%. Esto, dice, puede «ayudar a limitar el impacto en su rentabilidad hasta cierto punto».
Según la agencia, si durante el tercer trimestre se puede abrir, y hay una temporada «fuerte» «, los ratings de PortAventura podrían impulsarse al alza de nuevo, ya que en aquellos meses se genera el 50% del EBITDA del grupo.
Moody’s dice que PortAventura cuenta con unos 75 millones de euros en los balances a fecha de febrero de 2020, con un crédito de 50 millones que vence el 2023. La agencia de rating dice que sería «suficiente para cubrir un cierre total del parque hasta finales del segundo trimestre «pero que si hay un impacto más negativo del coronavirus y el cierre se alarga habrá» presión «en la situación financiera de la empresa.
Rechaza hacer valoraciones
Por su parte, PortAventura eludió ayer hacer cualquier tipo de comentarios al respecto, rechazando realizar valoraciones. La empresa sigue la expectativa de la evolución de la crisis causada por el Covid-19.
Cabe recordar que la empresa presentó el pasado día 19 un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor «debido a la obligación de mantener cerrado el complejo, decretada por las autoridades sanitarias».
La compañía señaló entonces que se aplicaíaá únicamente a aquellas personas que tuvieran que interrumpir la actividad laboral por los efectos del coronavirus, e incluye 312 personas de estructura dedicadas a servicios centrales y gestión corporativa. En esta situación excepcional, la empresa ha decidido complementar las prestaciones económicas reguladas por los ERTE hasta el 90% del salario de cada empleado. El expediente se aplicará mientras dure la causa de fuerza mayor.