Payeses, entidades ecologistas y movimientos sociales han unido este domingo sus reivindicaciones en Cambrils para reclamar un nuevo modelo económico para el Camp de Tarragona, defender el espacio agrario y exigir que se tumben los macroproyectos de Hard Rock y Lotte. Más de un centenar de personas y una quincena de tractores cortaron por la mañana la AP-7 en ambos sentidos con la intención de permanecer durante 24 horas, en señal de protesta por lo que consideran como «una estrategia para hacer desaparecer la payesía familiar».
Los manifestantes, convocados por una decena de entidades del territorio, se concentraron a primera hora en la Cooperativa Agrícola de Cambrils y hacia las 10.30 se dirigieron hacia la autopista. Previamente, los Mossos ya habían desviado todo el tráfico de la AP-7 desde L’Hospitalet de l’Infant hasta Vila-seca para evitar afectaciones. Desvíos que se mantendrán hasta el lunes por la mañana, cuando está previsto que termine la concentración.
En un primer momento, la intención era cortar el tráfico de la AP-7, la A-7 y la N-340, aunque finalmente la acción se concentró en la autopista. En un ambiente reivindicativo y festivo, las diversas organizaciones participantes protagonizaron varios debates, una batucada, una comida popular y una acampada que, a pesar de la lluvia que ha caído de forma intermitente, se mantendrá hasta primera hora del lunes. La intención es enlazar con el pleno de Mont-roig de este lunes donde se aprobarán trámites claves para el proyecto de Lotte
Bajo el lema ‘Defensem el Camp. Llaurem el Futur’, dos representantes de los colectivos han hecho la lectura del manifiesto en defensa del sector agrícola reclamando acabar con proyectos como Hard Rock, Lotte o la ampliación del puerto de Tarragona para los cruceros, entre otros. «Estas luchas no están desligadas. Tienen muchas cosas en común: la planificación de los recursos, la priorización del pequeño sector primario para caminar hacia la soberanía alimentaria y no poner el turismo por encima de todo, permitiendo que chupe la poca agua que tenemos», rezaba el manifiesto.
Más acciones de protesta
Eloi Redón, portavoz de la plataforma Aturem Hard Rock, ha catalogado de «éxito» la convocatoria y ha asegurado que las movilizaciones contra los macroproyectos «continuarán todavía durante muchos días». «Si el Govern, la clase política y todas estas empresas siguen empeñadas en la misma idea de querer trocear nuestra tierra y venderla, mientras nuestra payesía se va muriendo cada día, nosotros plantaremos cara cada vez más fuertes», ha prometido.
«Este territorio no se puede permitir que este tipo de empresas nos quiten el agua, nos contaminen los acuíferos y nos echen. No lo permitiremos», ha advertido Ramon Rojo, de la Plataforma Pagesa. Al mismo tiempo, ha denunciado que «en el Camp de Tarragona, el principal problema que tenemos es que no hay agua. No podemos regar, arrancamos cultivos y árboles, no tenemos cosecha y es una ruina para nosotros».
En este sentido, ha lamentado que «nosotros llevamos un año y medio sin agua, nos estamos arruinando y ahora resulta que a estas empresas les hacen unas concesiones excepcionales de agua del trasvase del Ebre».
Agua y contaminación
Por otro lado, Rojo ha alertado de que la implantación de una empresa como Lotte podría provocar la contaminación del agua del subsuelo. «Contaminarán el acuífero que tenemos en el Baix Camp» ha dicho, «si estas empresas arrojan sus vertidos, aunque pasen por supuestas depuradoras, se contaminará el acuífero y sufriremos todos. No podremos coger el agua ni para beber, ni para regar».
Mientras, Ton Crusells, de Unió de Pagesos, ha reivindicado que el de este domingo era «un acto muy necesario». «Entre todos tenemos que defender el territorio. Hoy no sólo vamos payeses, vamos toda la sociedad», expresó. Al mismo tiempo, advirtió que, más allá de la problemática de la sequía, «el Camp de Tarragona es una zona en la que se está destrozando espacio agrario por todos estos macroproyectos».