El Ayuntamiento de Vila-seca implantará próximamente un nuevo sistema de videovigilancia en el núcleo de La Pineda. De esta forma, se ampliará la red de cámaras inteligentes que ya están a disposición de la Policía Local, con el objetivo de mejorar la seguridad en el espacio público y, al mismo tiempo, generar una red de telecomunicaciones municipal de cara a impulsar futuras acciones de ciudad inteligente.
Hace unos años que el Ayuntamiento empezó a dotar diferentes espacios públicos con sistemas de videovigilancia y lo que ahora pretende es darle continuidad a esta red de cámaras para poder monitorizar el núcleo turístico de la ciudad.
En concreto, la previsión es desplegar cámaras de seguridad en cuatro puntos distintos del núcleo de La Pineda. Se incidirá tanto en zonas de equipamientos públicos, como el ámbito del Centre Cívic y el CAP o el pabellón polideportivo, así como espacios que asumen un mayor tránsito de personas en primera línea de mar.
Las cámaras que se utilizan en este tipo de sistemas son capaces de emitir imágenes y sonido en alta resolución y a tiempo real. Además de poder detectar intrusos en edificios municipales, estas cámaras ayudan a monitorizar eventos multitudinarios en tiempo real o controlar los accesos de personas y vehículos, entre otros.
Para poder interconectar los nuevos puntos de la red de videovigilancia municipal con el centro de control, ubicado en la comisaría de la Policía Local, también se abordará la ampliación de la red de fibra óptica. De hecho, esta parte será una de las acciones más destacadas, a través de nuevas canalizaciones que unirán ambos núcleos de población y que cubrirán tanto la franja marítima como el interior del barrio.
De esta forma, además de mejorar la connectividad de toda La Pineda, se da un primer paso de cara a desplegar nuevos sistemas de sensorización y monitorización del espacio público gracias a las nuevas tecnologías. En este sentido, además de las cámaras, la actuación incluirá la instalación de un sensor ambiental que aportará múltiple información acerca de la presencia de diferentes elementos en el aire, pero también de los niveles de ruido, por ejemplo.
Next Generation
El consistorio ya ha sacado a licitación el contrato para el suministro e instalación de la red de videovigilancia, así como los trabajos necesarios para la ampliación de la red de fibra óptica. Una vez adjudicadas, las obras durarán unos seis meses, con lo que podría estar activa ya la próxima temporada turística. La inversión para desplegar este sistema ronda los 600.000 euros y cuenta con financiación de los fondos Next Generation, a través de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos.
