La movilización de los vecinos de Cunit tiene como símbolo el bosque de Miramar, un área de 91.000 m2 ahora de masa forestal sobre la que hay un proyecto urbanístico para levantar viviendas unifamiliares y una zona de actividades económicas en forma de naves y un hotel.
Los vecinos piden conservar ese bosque como pulmón, zona de esparcimiento, refugio climático y una nueva forma de hacer en un momento de crisis climática en la que los criterios urbanísticos y de sostenibilidad deben cambiar forzosamente.
Piden suspender el Plan General que data de 2006, entonces con una mentalidad de expansionsimo urbano, y con ello paralizar el proyecto que condena a ese bosque. Y durante al paralización de licencias, repensar el modelo de Cunit que se quiere para los próximos años.
Las necesidades y las demandas ciudadanas han cambiado, señalan los manifestantes. El modelo expansionista está caducado, además de que en el municipio hay centenares de viviendas vacías como para desarrollar nuevas promociones que consumen terreno. Ahora debe ponerse en valor y proteger los espacios naturales urbanos, señalan.
De hecho los urbanistas recomiendan que también como forma de prevenir posibles nuevas pandemias deben repensarse los modelos de crecimiento creando espacios más esponjados y salpicados de zonas verdes que regulen la temperatura de su entorno.
Es lo que los ecólogos definen como refugios climáticos o áreas de sombra. Miembros de SOS Cunit Natura, que protesta contra la urbanización prevista explican que se han tomado temperaturas en el bosque y hay hasta 19 grados menos respecto al centro urbano donde todo es cemento.
Los vecinos cortaron por momentos la C-31 para pedir la protección del bosque y un cambio del Plan General que diseñe una nueva ciudad con prevalencia de áreas verdes. Cunit crece a ritmo de mil empadronados al año principalmente de vecinos que han dejado el área metropolitana de Barcelona y buscan lugares más tranquilos.
Los participantes en la protesta señalan que es una situación en la que no debe caerse en el error de crear un nuevo suburbio metropolitano y planificar con zonas verdes y espacios abiertos en beneficio de la calidad de vida y de la salud.
En los últimos meses han realizado diversas acciones reivindicativas como la limpieza del bosque, colocación de cajas nido, visitas explicativas o contabilizar las especies de fauna y flora. Ahora señalan que mantendrán las protestas para pedir la conservación del bosque.
El gobierno de Cunit explica que toda la zona está catalogada como urbanizable en el Plan General de 2006 y que, además, las sucesivas presentaciones del proyecto han superado fases sin que nadie presentase alegaciones.
El concejal de gobierno Xavier Lorenzo explica que los propietarios del terreno tienen derechos reconocidos y que cualquier impedimento para desarrollar la urbanización podría llevar a indemnizaciones millonarias además de posibles denuncias por prevaricación.
El Plan General reconoce como urbanizable 45.000 m2 en las que se programó la mitad para actividades económicas y la otra para vivienda, además de los viales, calles y zonas verdes.
El proyecto se aprobó de una Junta de Gobierno de 2019 por unanimidad de los partidos presentes. El 5 de marzo se ratificó lo aprobado, también por unanimidad de todos los partidos del gobierno, entonces CiU, ICV-EV, ERC y Caviem Cunit, explica Lorenzo.
Urbanisme
Con esa aprobación el documento pasó a la Comissió d’Urbanisme de la Generalitat que señaló la necesidad de modificaciones. Los propietarios del terreno plantearon como actividad económica levantar pisos turísticos, pero Urbanismne rechazo esa calificación, por lo que tuvo que replantearse el proyecto.
En lugar de bloques de cuatro alturas se pasó a viviendas de unifamiliares ganando una veintena. La zona de actividades turísticas es para naves o talleres y también se contempla un posible hotel. En todo caso la zona de actividades económicas no está detallada. El hotel está condicionado a accesos a la autopista y la tipología de naves o talleres dependerá del momento en que el promotor desarrolle la zona.
La zona residencial será de viviendas unifamilares de dos alturas. Según explica el concejal Xavier Lorenzo, estará integrada en una zona verde de unos 30.000m2 y entre las zonas urbanizables también habrá una pantalla vegetal.
Lorenzo señala que el actual gobierno validó el proyecto ya que venía aprobado de anteriores consistorios y además con las modificaciones determinadas por la Comissió d’Urbanisme. En este sentido señala que no van a paralizar el proyecto.
También explica que la zona de actividades económicas debe dar empleo a las familias que decidan instalarse en Cunit y no deban salir del municipio para trabajar. Defiende que no hay otro espacio para poder desarrollar una zona de actividades económicas.