La tecnología eléctrica va revolucionar la movilidad aunque queda mucho camino para popularizarla. Por el precio de los coches eléctricos, pero también por la infraestructura necesaria en las ciudades y viviendas para las recargas. Estas todavía son muy lentas, o muy caras en el caso de ser rápidas por la exigencia de kilowatios a contratar.
Muchos municipios en un intento de incentivar esa movilidad sostenible sin emisiones instalaron puntos de recarga gratuitos, pero parece que esa gratuidad llega a su fin. Esa energía para cargar coches eléctricos la pagan ahora los ayuntamientos. En el Baix Penedès El Vendrell, Calafell y Cunit disponen de cargadores.
Lo que era una medida esperada por el incremento de coches eléctricos y el coste energético parece que empieza a cristalizarse. Los puntos de recarga para coches eléctricos han sido gratuitos hasta ahora. Pero Barcelona ha comenzado a cobrar por su uso y ese paso ya se lo plantean otras localidades que cuentan con los puntos de recarga gratuitos.
El Vendrell y Cunit ya estudian cobrar por su uso. Calafell, de momento, señala que los mantiene gratuitos. Esta localidad dispone de unos puntos de recarga en los aparcamientos del mercado municipal y de la carretera C-31 en Segur.
Sin embargo Cunit y El Vendrell analizan cobrar por recargar el coche eléctrico. Ambos ayuntamientos estudian cómo realizar ese cobro e incluso si se discrimina entre residentes o no.
Más puntos
En Cunit hay cuatro puntos de recarga eléctrica entre los del pabellón y los de la zona de Les Oliveres. El Ayuntamiento implantará otros ocho postes de recarga en cuatro localizaciones nuevas que están por determinar.
El concejal de Medio Ambiente, José Manuel Cabada, explica que se está estudiando cómo aplicar un cobro. La intención es mantener la gratuidad para los coches que pagan el impuesto de circulación en el municipio y que pague el resto.
En el mismo sentido El Vendrell ve necesario que recargar el coche eléctrico no sea gratis para el usuario. La concejal Nuria Rovira detalla que los expertos en movilidad eléctrica recomiendan plantear el cobro para recargar el vehículo.
A la espera de cómo puede aplicarse esa ordenanza, en Barcelona se ha hecho distinguiendo entre usuarios habituales o esporádicos. Los habituales y particulares tienen una tarifa de 50 euros al año, que pueden compartir dos familias. Para los profesionales, el abono será de 100 euros al año.
Para los usuarios abonados el precio oscila entre los 0,22 euros el Kw/h y los 0,40 en función de si la carga es nocturna o diurna o si se hace en cargador en la calle o parking. Para los no abonados costará entre 0’44 y 0’49 euros el Kw/h.