La brigada científica de la Policía Nacional ha determinado que el número de cuerpos hallados hasta el momento en el interior del edificio calcinado de València son nueve, uno menos que la cifra oficial que se había ofrecido a primera hora de esta tarde.
Así se ha determinado en el proceso de identificación de los cuerpos localizados en el interior del edificio, según señala la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana.
Y es que la cifra oficial de víctimas mortales en el incendio de un edificio de València se elevaba a 10 tras la primera inspección ocular que han hecho en el interior de las instalaciones los bomberos y la Policía Científica, según ha avanzado la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé.
Bernabé ha indicado este viernes en el Puesto de Mando Avanzado que el número de cadáveres encontrados coincide con la cifra de personas que finalmente estaban ilocalizadas, ya que durante este viernes por la mañana han encontrado a 4 de las 14 personas que estaban sin localizar.
Preguntada sobre si entre esos cuerpos está una familia formada por un matrimonio y sus tres hijos, la delegada ha recordado que un juzgado de Valencia ha decretado el secreto de sumario de esta causa, por lo que ha pedido dejar que la investigación siga su curso, y ha indicado que todavía no hay una hipótesis clara sobre el origen del incendio.
Ha señalado que se van a hacer más inspecciones oculares en el interior del edificio, y ha agradecido «la humanidad, solidaridad y dedicación» de los profesionales de emergencias y de personas anónimas y de los vecinos del barrio de Campanar, que se han volcado en ayudar y que en la tarde de ayer también salvaron vidas.
La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha explicado que se ha incrementado el número de personas realojadas en hoteles de la ciudad a 105 -frente a las 35 de esta mañana-, después de que muchos pasaran la noche en casas de amigos o vecinos de la zona.
Catalá ha explicado que comienza ya el traslado tanto de los cuerpos como sin vida rescatados como de los familiares para darles la atención necesaria, y ha calificado de «héroe» a Julián, el conserje de uno de los edificios de este complejo residencial que fue «puerta por puerta» para intentar que todos los vecinos salieran.