«Es una decisión que la tenía tomada desde hace mucho tiempo y no la he tomado yo solo». En una larga explicación, Arnaldo Otegi oficializó este lunes que no será el candidato a lehendakari de EH Bildu en las elecciones autonómicas de 2024, tal y como adelantó El Correo en exclusiva el domingo.
El histórico dirigente de la izquierda abertzale seguirá al frente de la coalición soberanista. De hecho, aspirará a revalidar su cargo como coordinador general, pero se escuda en el «cambio de ciclo» político en el País Vasco para encomendar la cabeza de cartel a una nueva figura que se dará a conocer en diciembre.
La dirección de EH Bildu se reunió este lunes y allí Otegi comunicó su decisión -primero a puerta cerrada y luego en una comparecencia pública- de apartarse de la carrera de Ajuria Enea. Pone así fin a semanas de especulaciones en las que él mismo venía jugando al despiste. Defendía que si tenía que ser candidato lo sería, aunque ya iba deslizando que en su formación hay «banquillo», que su decisión se basaría en «factores familiares», que lleva «muchos años militando» y que supone «también un desgaste en cierta medida con mi familia».
Las autonómicas de 2024 -aún sin fecha pero el adelanto a marzo cobra fuerza- representaban la primera oportunidad de Otegi para ser candidato a lehendakari, si bien ya ejerció ese papel de facto en 1998 y 2001 al frente de las planchas de Euskal Herritarrok. Bajo la sigla de EH Bildu lo intentó hasta el final en 2016, pero la Justicia ratificó su inhabilitación especial para empleo o cargo público hasta 2021.
Con una nueva cara, EH Bildu busca afianzar el crecimiento electoral que ya experimentó en las municipales y forales de mayo y también en las generales de julio, cuando se quedó a apenas mil papeletas de dar el ‘sorpasso’ al PNV. Los soberanistas diagnostican que el desgaste de los jeltzales, añadido ahora a la conmoción interna por el recambio exprés de Iñigo Urkullu por Imanol Pradales como candidato a lehendakari, les otorga posibilidades para competir de tú a tú. Otegi cree que el nuevo candidato nacionalista es «lo más parecido» al actual lehendakari y representa la «continuidad» a su modelo.