El incremento de la factura eléctrica está ahogando desde hace meses a muchas familias. Según un estudio de Cambridge Econometrics, en el caso de los españoles con más ingresos este pago se habría disparado en 1.012 euros al año, mientras que los hogares con menos recursos habrían sufrido un aumento de 550 euros. En este informe se destaca también que para los consumidores con menos ingresos este aumento de la factura les supone un castigo del 73%.
Otro dato interesante del estudio de Cambridge Econometrics es que la proporción del gasto en energía respecto al total de los hogares ha aumento considerablemente desde 2020. Así, un hogar medio con los ingresos más bajos dedicará este año el 8,8% de su gasto total a la energía, mientras que ese porcentaje era del 5,6% en 2020.
Por lo que respecta a Catalunya, los hogares catalanes destinan un 9,6% de sus ingresos a pagar la factura energética, situándose el gasto medio mensual en gas, electricidad y carburante en 210 euros. Así lo recoge el estudio ‘La factura energética en el hogar’, realizado por el Grupo Mutua Propietarios, donde también se aprecia que los hogares más vulnerables son los que, en proporción, más ingresos destinan al pago de la energía, llegando a utilizar el 25% del total.
Desde las asociaciones de consumidores califican la situación de «preocupante» y recomiendan a los ciudadanos informarse más y mejor sobre las posibilidades que les ofrece el mercado. Esther Lorente, delegada de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en Catalunya, recuerda que «llevamos tiempo pidiendo que se apliquen medidas para paliar un poco este aumento del precio de la energía, como rebajas del IVA, excepción de impuestos, etc. También hemos pedido a Indústria que nos informe cuántas familias tienen el bono social en Catalunya, porque vemos que existe una falta de conocimiento por parte de la gente y creemos que no se está dando toda la información y que habría que agilizar los trámites».
Sobre la ayuda del bono social, el secretario general de Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, comenta que «aunque ha sido aumentado por el Gobierno, sigue habiendo carencias. Es necesaria una campaña de información institucional para que haya más conocimiento por parte de los consumidores y también obligar a las eléctricas a enviar comunicaciones a los consumidores, así como aumentar la masa de consumidores con estas ayudas».
Sánchez también cree que, «aunque el Gobierno ha llevado a cabo muchas iniciativas para compensar esta subida de precios, creemos que son insuficientes. Tendría que ir más allá y, por ejemplo, apostar por la intervención de los precios».
Con la finalidad de afrontar el invierno, un 70% de los catalanes –según el estudio del Grupo Mutua Propietarios– afirma estar dispuesto a cumplir con las medidas sugeridas por el Gobierno central dentro del Plan + ES (Plan Más Seguridad Energética), con lo que se pretende aportar a los hogares más seguridad para afrontar los precios de la energía.
Según la subdirectora general de estrategia, clientes y canales alternativos del Grupo Mutua Propietarios, Laura López, «la situación actual exige a los hogares y las comunidades de propietarios una reflexión hacia un modelo de consumo energético más eficiente y responsable que contribuya a preservar los recursos».
Desde la OCU, Esther Lorente admite que «el invierno será complicado en muchos hogares, también por el problema del gas. Si no estás en una operadora de mercado regulado –que es el más económico–, te saldrá más caro, llegando a doblar o triplicar la factura».
Las organizaciones de consumidores recomiendan a la ciudadanía que esté bien informada. «Deben mirar si pueden solicitar el bono social, indagar en el mercado a través de comparadores, etc. El problema es que la mayoría de consumidores no compara y se cree lo que el comercial de su eléctrica les ha vendido», se lamenta Rubén Sánchez desde Facua. Esther Lorente también recomienda a los consumidores que «miren bien su factura, que usen comparadores, que comprueben la potencia contratada, ver si están en el mercado libre o en el regulado, mirar las necesidades reales de cada núcleo familiar y si tienen la tarifa más económica».
Cambio de hábitos
El estudio de Grupo Mutua Propietarios también recoge que los hogares consultados aseguran que cambiarán sus hábitos para gastar menos energía, incluyendo acciones como cerrar las persianas de noche (88%), apagar la calefacción mientras duermen (82%) o mantener el hogar a una temperatura máxima de entre 19 y 21 grados (76%). En menor medida, un 59% de los encuestados afirma que cambiará el coche por el transporte público. Para intentar cumplir con estos compromisos de la mejor forma posible, los catalanes ya se han anticipado realizando obras en su casa. Entre las principales mejoras realizadas se observan algunas que comportan un retorno económico más rápido, como el cambio de bombillas por sistemas de iluminación led (76%), electrodomésticos energéticamente eficientes (59%) o aislamiento en las ventanas (51%).