La exconsellera de Ensenyament Clara Ponsatí recogió ayer miércoles su acreditación como eurodiputada en Bruselas tras adjudicarse su escaño el pasado sábado con la salida del Reino Unido de la UE, y pese a que la Junta Electoral Central (JEC) dejó vacante el mismo por no haber acatado ella la Constitución.
La ya eurodiputada de JxCat llegó al Parlamento Europeo acompañada de sus compañeros de partido Carles Puigdemont y Toni Comín, con quienes salió de España en 2017 tras la declaración unilateral de independencia de Catalunya, y dijo que «hay mucha gente en Catalunya que está muy contenta» con su llegada a la Eurocámara. «Acabo de incorporarme como miembro del Parlamento Europeo con la representación de centenares de miles de catalanes que dieron apoyo a la lista de Lliures per Europa, subrayó Ponsatí.
La eurodiputada, reclamada por el Tribunal Supremo por la causa contra el Procés, señaló que, por el momento, «sigue siendo residente» en Escocia, adonde se trasladó en marzo de 2018 tras unos meses en Bélgica, y que seguirá presentándose ante el tribunal de Edimburgo que está procesando su euroorden.
La justicia española ha solicitado al Reino Unido que continúe el trámite de la euroorden de detención de Ponsatí, y le pide un posible reforzamiento de las medidas cautelares sobre ella si entiende que hay mayor riesgo de que la procesada eluda el procedimiento, como por ejemplo trasladándose a un país donde sí tenga inmunidad como eurodiputada, como Bélgica.
Carla Ponsatí subrayó ayer que el juez escocés «le había dado permiso para viajar libremente», y que informó a las autoridades del país de su viaje a Bélgica.
Sobre la decisión de la JEC de dejar su escaño vacante por no acatar la Constitución en España, Ponsatí señaló que a este organismo «le cuesta leer», y le recomendó que «vuelvan a leer la decisión del Tribunal de Justicia de la UE que dejaba las cosas muy claras», al tiempo que confió en que «corrijan ese error de lectura».
El Parlamento Europeo mantiene con su reconocimiento de Ponsatí la misma postura que adoptó con Puigdemont y Comín, y, en línea con esa sentencia del TJUE, que determinó que Oriol Junqueras debería haber sido considerado eurodiputado y gozar de inmunidad desde la proclamación de los resultados de los comicios.
Respecto al suplicatorio que la justicia española pedirá al Parlamento Europeo para levantar su inmunidad, Ponsatí subrayó que defenderán que «la causa criminal es política» y explicarán «el comportamiento de la justicia española ante el caso catalán».
Ponsatí entrará en la Eurocámara como no inscrita en ninguno de los actuales grupos parlamentarios después de que fracasara el intento de Puigdemont y Comín de integrarse en los Verdes/ALE, donde sí está ERC.