El hasta ahora presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha formalizado este lunes su renuncia al cargo -como ya había anunciado hace unas semanas- en una ejecutiva nacional tras la que ha dicho a los medios de comunicación: "Tengo muchas ganas de ayudar, de escuchar a todo el mundo y de estar al lado de ERC".
Junqueras, que prevé volver a optar a la presidencia de la formación en el congreso nacional del próximo 30 de noviembre, a partir de ahora y hasta entonces recorrerá las agrupaciones territoriales del partido para recabar apoyos.
Las funciones de la presidencia de ERC recaerán a partir de ahora en la secretaria general, Marta Rovira. Todos los cargos de la ejecutiva se renovarán tras ese congreso nacional, en el que la militancia tendrá la última palabra.
Para ese día todavía quedan muchas incógnitas por despejar, como si se configurará una lista alternativa a Junqueras con posibilidades de derrotarlo y quién podría liderarla.
Con la marcha de Junqueras se pone punto final a una etapa que comenzó en 2011, cuando el tándem formado por él y Rovira tomó las riendas del partido para dejar atrás la guerra abierta entre Josep-Lluís Carod-Rovira y Joan Puigcercós.
Después de tres reveses electorales seguidos, culminados con la debacle de las últimas elecciones catalanas (de 33 a 20 escaños), ERC se divide ahora entre quienes creen que Junqueras debe seguir pilotando el barco y quienes quieren cerrar definitivamente este capítulo.
