Esquerra Republicana llega a la cita definitiva de este viernes más dividida que nunca en Tarragona. A lo largo de este jueves por la mañana ya se han posicionado destacados miembros de la formación independentista, que evidencian que la votación de mañana puede estar más igualada que nunca.
Uno de los primeros en mostrar su posicionamiento ha sido el exalcalde de Tarragona, Pau Ricomà. En un hilo de X, el exPrimer edil anuncia su ‘no’, ya que en el preacuerdo «estamos defendiendo lo que querríamos que fuera, pero no lo que es».
A juicio de Ricomà, «este PSC no tiene nada que ver con el de los años 80. Se ha rehecho electoalmente a costa del electorado de Cs y está claro que entre incumplir el acuerdo y perder su electorado está claro qué es lo que hará». Asimismo, ricomà indica que «el proyecto política de Illa no es el de la construcción nacional», a la vez que reitera que «la investidura se hará en base a un preacuerdo, no tenemos el acuerdo concreto».
En la misma línea se expresa el concejal del Ayuntamiento de Tarragona y secretario general de la Federació d’ERC en el Camp de Tarragona, Xavier Puig. «El avance en financiación es una mejora, pero no es el concierto económico ni la soberanía fiscal. El resto de impuestos no tienen ni calendario», indica el edil, quien añade que «muchos otros aspectos del preacuerdo suenan bien, pero no sé ver avances concretos». Por ello, Puig se muestra partidario de «hacer valer mucho más nuestros veinte diputados», indicando que «estar en la oposición con las manos libres nos hará más fuertes».
También en el bando del no está el exconcejal del Ayuntamiento de Tarragona y exdiputado en el Parlament de Catalunya, Sergi de los Rios. «Votaré no. Con la cabeza, estoy convencido de que el PSOE nos volverá a engañar en la aplicación del nuevo sistema de financiación, como ha hecho siempre. Y con el corazón, no quiero a Illa como President de la Generalitat», indica.
Salvador y Salvadó dirán sí
Por su parte, el diputado en el Congreso, Jordi Salvador, ha anunciado su voto favorable al preacuerdo. «El pacto es bueno y significa dar un paso de gigante en la soberanía del país y de nuestra gente», indica el diputado, quien valora que el acuerda «que deberá vigilarse», significa «un mísil directo al régimen del 78».
Salvador enfatiza que «no tengo ninguna simpatía por Illa, pero ha ganado las elecciones claramente y a nosotros nos ha tocado tener 20 diputados». Por ello, «con esta fuerza, imponer nuestro discurso es una pasa de gigante», sostiene.
Asimismo, el diputado en el Parlament Albert Salvadó afirma que votará ‘sí’ porque el texto «arrastra al PSC y al PSOE hacia la resolución del conflicto político» y «nos permite hacer un avance histórico hacia el concierto económico, protege el Ebre y sigue apostando por los hospitales de las Terres de l’Ebre», a la vez que «nos permite seguir ganando espacios de soberanía».