El olivo recuperado de Cervera del Maestre, en el término municipal de Castellón, ha sido distinguido con el Premio al Mejor Olivo Monumental de España 2024 por la Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO).
Este premio refuerza el valor histórico y cultural de los olivos en esta área castellonense, cerca de Les Terres de l’Ebre, reconocida mundialmente por su densa concentración de olivos milenarios.
Este ejemplar, de la variedad Farga y con un tronco de 6,95 metros de perímetro a 80 centímetros del suelo, es notable tanto por su tamaño como por su antigüedad, estimada de entre 1.100 y 1.200 años.
El ejemplar está situado en una colina que ofrece vistas al casco antiguo y al castillo medieval de Cervera del Maestre, el olivo ha sido testigo de la evolución cultural y social de la región desde el siglo X.
Recuperado en 2019 gracias a los esfuerzos conjuntos de la Mancomunitat Taula del Sénia, la Asociación Territorio Sénia y el Ayuntamiento de Cervera del Maestre (Castellón), el olivo ha sido reintegrado no solo para la producción agrícola, sino también para actividades culturales, turísticas, medioambientales y deportivas de la comunidad.
Este es el séptimo premio que recibe un olivo del Territorio Sénia, destacando a la región como la líder en la conservación del patrimonio olivarero y el desarrollo del oleoturismo, contribuyendo significativamente al desarrollo económico y a la sostenibilidad ambiental en la confluencia de la Comunidad Valenciana, Catalunya y Aragón.
El Territorio del Sénia se halla en la zona donde confluyen la Comunidad Valenciana, Catalunya y Aragón. Este territorio tiene 27 municipios, vinculados por su geografía, historia, idioma y cultura, y cuenta a la vez con la mayor concentración de olivos milenarios del mundo.
La existencia de 7.000 olivos milenarios es lo que hace de esta comarca un lugar único, que ofrece a las comunidades locales numerosas oportunidades para el desarrollo rural -incluida la recuperación de olivos antiguos abandonados y su puesta en producción para obtener aceite- y una mayor cooperación entre los sectores económicos, junto al “oleoturismo” y otras ventajas.
La producción anual media de aceite de oliva en el área se estima en más de 12.000 toneladas, si bien el aceite de olivos milenarios sólo llega a 10.000 litros. Estas actividades generadoras de ingresos han ayudado de forma notable a mejorar las condiciones de vida de la población local, según la AEMO. Además, existen variedades distintas de aceitunas en cada olivar, que mejoran la polinización de las flores. Y al conservar estas variedades, se contribuye a la biodiversidad.