El incendio ocurrido esta madrugada en la residencia Jardines de Villafranca, en Villafranca de Ebro (Zaragoza), en el que han fallecido al menos diez residentes y uno se encuentra en estado crítico, es el más trágico registrado en centros de mayores en lo que va de siglo en España.
En Zaragoza también, otro fuego declarado el 12 de julio de 2015 en la residencia privada "Santa Fe", de Cuarte de Huerva, a 6 kilómetros de la capital aragonesa, causó la muerte de nueve personas mayores y provocó heridas a otros nueve internos. En julio de 2017, la Audiencia de Zaragoza condenó a 61 años de prisión a la mujer que lo provocó para expresar así su malestar por su ingreso en la residencia.
El 19 de enero de 2022 otros nueve ancianos murieron y cuatro resultaron heridos en el incendio registrado en una residencia de ancianos de Moncada (Valencia), a causa de un cortocircuito en una regleta. El mismo día fallecieron cinco de los ancianos, mientras que las otras cuatro muertes se produjeron los días siguientes.
En un incendio en una residencia de Sevilla, declarado el 9 de febrero de 2010, fallecieron siete residentes y diez resultaron heridos en un fuego que se inició poco antes de la medianoche en una residencia de ancianos situada en el número 98 de la calle Marqués de Nervión. Un fallo eléctrico sin negligencia humana fue la causa del siniestro.
En 2006, el 28 de marzo, cinco personas -cuatro hombres de entre 30 y 80 años, y una mujer de 50-, todos ellos enfermos, fallecieron en el incendio declarado en la residencia de la tercera edad de San Lorenzo de Brindis de Massamagrell (Valencia). También un cortocircuito fue la causa del incendio en el centro, que albergaba ancianos y enfermos mentales.
Hasta el de hoy, el suceso más grave registrado este año en una residencia de ancianos en España se registró el 18 de febrero pasado, cuando tres mujeres fallecieron a causa del fuego en la residencia dependientes Juan XXIII en el distrito madrileño de Aravaca.
