El Departament d’Educació de la Generalitat ha asegurado que tanto la literatura catalana como la castellana seguirán siendo asignaturas de modalidad en el segundo curso de Bachillerato. La consejera de Educación y Formación Profesional, Esther Niubó, ha afirmado que esta decisión responde a la “singularidad lingüística y cultural” de Catalunya y ha subrayado que la literatura es una “línea roja” en la aplicación de la LOMLOE.
Este anuncio llega tras la polémica generada por la comunicación previa del Departament a los centros educativos, donde se informó que a partir del curso 2025-2026 se aplicarían cambios en las materias del Bachillerato, incluyendo la conversión de las literaturas catalana y castellana en asignaturas optativas. La reacción de la comunidad educativa y los sectores culturales no se hizo esperar, con críticas que alertaban de la posible pérdida de peso de ambas literaturas en el currículo escolar.
Ante la presión recibida, Niubó ha confirmado que la Generalitat está en conversaciones con el Ministerio de Educación para asegurar el mantenimiento de ambas materias de modalidad y ha valorado de forma positiva la “buena receptividad” mostrada por el Gobierno central. Esta medida busca preservar el protagonismo de la literatura catalana y la castellana en la formación de los estudiantes de Bachillerato, garantizando que no se vean relegadas a una posición secundaria como asignaturas optativas.
La consellera ha negado que haya ninguna «rectificación» por parte de Educació y ha apuntado que el documento que ha circulado es «vivo», ya que es un documento de trabajo. «No es rectificar, es simplemente informarles de que cuando llevamos la modificación de los currículos de bachillerato lo haremos atendiendo y respetando esta línea roja que nosotros mismos nos marcamos», ha indicado.
Con esta decisión, el Departament d’Educació rectifica su posición inicial y responde a la demanda de la comunidad educativa de proteger el papel de la literatura en la educación. La Generalitat también ha manifestado su intención de dialogar con los diferentes sectores implicados para aplicar de forma consensuada la LOMLOE en el sistema educativo catalán.
Este movimiento se enmarca en una estrategia más amplia del Govern para ajustar el sistema educativo a las particularidades lingüísticas y culturales de Catalunya, reafirmando su compromiso con la defensa de la literatura como parte esencial del currículo formativo. La decisión de mantener estas materias de modalidad se percibe como una victoria para la comunidad educativa y un mensaje claro de la Generalitat sobre la importancia de la literatura en la formación integral de los jóvenes.