Dos tercios de la población catalana estuvieron expuestos en 2023 a niveles de contaminación del aire por encima de los nuevos límites legales aprobados en 2030 por el Parlamento Europeo, según un informe sobre la calidad del aire elaborado por Ecologistas en Acción.
El documento, presentado este pasado miércoles, ha revelado que los puertos de Barcelona y Tarragona, y la Plana de Vic, superaron los valores límite de partículas PM10, mientras que el Prepirineo, la Plana de Vic y el aeropuerto de El Prat mostraron una gran afectación de la contaminación por ozono troposférico.
Por su parte, Manlleu (Osona) registró el mayor valor del estado en benzo(a)pireno (BaP), un contaminante cancerígeno relacionado con el aprovechamiento energético de biomasa, del que se han superado los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 17 estaciones catalanas.
A pesar de la mejora de la calidad del aire respecto a los últimos años en Cataluña, el 100% de la ciudadanía ha respirado niveles de contaminación por encima de los límites establecidos por la OMS y el 75% por niveles de contaminación superiores a lo que fija la nueva directiva de calidad de aire.
Desde Ecologistas en Acción señalan que la contaminación de la calidad del aire «tendría que abordarse como un problema sanitario de primer orden», ya que, según la Agencia Europea de Medio Ambiente, en 2021 murieron prematuramente hasta 21.000 personas en España por enfermedades agravadas por la mala calidad del aire.
El informe se ha elaborado tras analizar los datos recogidos en 785 estaciones oficiales de medida instaladas en toda España e indica que la población que respiró aire contaminado por encima de los obsoletos límites legales actuales se redujo a 2,9 millones de personas.
