Catalunya necesita que se construyan 190.000 viviendas hasta 2030 para atender la demanda de la población, según los estudios preliminares del Plan territorial sectorial de l’habitatge de la Generalitat para guiar las políticas públicas de vivienda hasta el citado año.
Así lo explicó el secretario de Habitatge i Millora Urbana de la Generalitat, Carles Sala, en la apertura de una jornada técnica de los Colegios y Asociaciones de Agentes Inmobiliarios (API) sobre expectativas para 2016.
Concretó que las proyecciones apuntan a la construcción de unas 10.000 viviendas al año al principio del periodo, los promotores catalanes prevén esta cifra para viviendas iniciadas en 2016, y entre 18.000 y 22.000 anuales en los últimos años.
Sala afirmó que los datos de 2015 indican que «se consolida el cambio de tendencia» en el sector inmobiliario de Catalunya tras varios años de crisis.