El Consell Executiu ha aprobado el Pla Estratègic de Mobilitat i Gènere (PEMG), que incluye 43 medidas para incorporar esta perspectiva en la planificación del transporte y la movilidad, como por ejemplo la creación de un abono de transporte público con tarifas reducidas para las cuidadoras de personas dependientes, mujeres víctimas de violencia machista y otros colectivos en situación de vulnerabilidad.
El objetivo es mejorar la seguridad de las mujeres y de los colectivos LGTBI al transporte público y erradicar las situaciones de violencia que sufren. Fruto del trabajo conjunto del Departament de Territori i el d’Igualtat i Feminismes, se ha redactado a través de un proceso participativo con administraciones, empresas, entidades y grupos sociales determinados.
El plan también busca dar solución en las dificultades en la movilidad para las mujeres residentes en entornos rurales, impulsando las paradas de buzo a demanda.
También plantea la elaboración de herramientas prácticas para prevenir el acoso sexual y el LGBTI-fobia en el transporte, como por ejemplo el botón lila en las aplicaciones del transporte público y el reparto de mercancías a domicilio.
Precisamente, uno de los objetivos específicos del plan es garantizar que los espacios de reparto y las áreas de estacionamiento sean seguros. Así, se considera rediseñarlos teniendo en cuenta elementos como la iluminación, la accesibilidad, la conservación de las equipaciones y la afluencia de gente, entre otros.