La mayoría de vecinos de La Bisbal del Penedès que han participado este domingo en la consulta sobre la implantación de un polígono industrial en el municipio han votado en contra.
La consulta no era vinculante y el equipo de gobierno defiende la implantación de esa zona industrial. Pero muchos vecinos están en contra porque señalan que tendrá un gran impacto sobre el territorio.
Los vecinos contrarios impulsaron una consulta ciudadana. Sabían que no es vinculante, pero consideran que el resultado debe ser entendido como una presión ante la decisión del Ayuntamiento.
En la votación de este domingo participaron 690 personas (53,7%). Un total de 431 (el 62,6%) rechaza la implantación del polígono que pretende una empresa privada. A favor han votado 238 vecinos, hubo 15 votos nulos y 6 en blanco. En la consulta podían participar 1.285 vecinos del núcleo más próximo a los terrenos.
Es el debate entre quienes piden preservar el paisaje y los que señalan la necesidad de crear empleo
El gobierno conoce de manera ahora detallada el rechazo de los vecinos que han votado. Era previsible el resultado ya que desde que se conoció el proyecto se han sucedido las campañas en contra y el rechazo de parte de la población.
Sin embargo considera que es un resultado ajustado y nada contundente en favor del ‘no’.
Es el debate entre quienes rechazan el impacto de crear naves industriales en un terreno ahora de viñas sin prácticamente quien las explote y con el consiguiente paso de camiones y quien considera que el municipio necesita crear empleo.
Pese al resultado el gobierno de La Bisbal permitirá la implantación de la zona industrial en Les Planes del Vent. La alcaldesa Agnès Ferré ya explicó que los impulsores tienen una empresa interesada en implantarse.
El gobierno local presenta el proyecto como de interés comarca y ya ha logrado respaldo del PSC del Baix Penedès
Los vecinos ya plantearon la consulta para mostrar de manera democrática la opinión sobre el proyecto. Ahora esperan una reflexión del consistorio.
El polígono tendrá 72 hectáreas de las que 48 serán naves y el resto son zonas verdes y calles. El Ayuntamiento ya obligó a modificar un primer proyecto de 84 hectáreas.
El gobierno buscó apoyos en la comarca ya que señala que la generación de empleo es una necesidad para todo el Baix Penedès. El PSC comarcal muestra su apoyo el proyecto.