Este junio se han cumplido 15 años del anuncio, en el Boletín Oficial del Estado (BOE), de la creación del juzgado de violencia de género exclusivo en Reus, aunque por entonces no se anunció fecha de apertura. El actual Jutjat de Violència Sobre la Dona nº 1 de Reus cumplirá oficialmente 15 años en activo el 30 de diciembre de este año.
El actual juez titular, D. Álvaro Lorente Rubio –al frente desde el 15 de diciembre de 2021– destaca que, en cuestión de jueces titulares anteriores a él, ha habido «en torno a unos 10»; destaca, pues, una «alta movilidad», puesto que «desde 2017, ha habido seis jueces desarrollando sus funciones, contando titulares y sustitutos». A modo de recuento, el juez del Jutjat de Violència Sobre la Dona nº 1 de la ciudad, que abarca el partido judicial de Reus expresa que, actualmente, se están tramitando 212 asuntos en materia de juicios rápidos, que «es el modo habitual de entrada de asuntos». A ello, aporta D. Lorente, hay que sumar «los distintos tipos de procedimientos, diligencias previas, sumarios y, claro, expedientes de familia».
En materia de diligencias urgentes, el año 2022, «registramos 445 en todo el año». En cuanto a diligencias previas, «sobrepasamos las 300», sin olvidar los sumarios, que «son más escasos, pero mucho más costosos en términos de tramitación». A principios de este año, «se notó un aumento considerable de actuaciones, aunque se han estabilizado y creo que alcanzaremos cifras similares, quizás algo más elevadas que en 2022».
El juez detalla que el juzgado se articula en dos ejes: penal y derecho de familia «derivado de aquel, en los casos de violencia de género, tal como establece la ley; Y, muchas veces, se olvida, pero entra en juego un factor importantísimo: los menores».
El día ordinario en el juzgado se estructura basándose en los juicios rápidos (atestados y denuncias) y «a partir de ahí, se toman declaraciones, se celebran comparecencias de orden de protección, prisión; declaraciones o actuaciones de los restantes procedimientos (diligencias previas), en función de la agenda del juzgado; y, además, hay dos días específicos para celebrar juicios de familia». Con la mirada puesta en el futuro, D. Lorente distingue que, en cuanto a mejoras, tienen «las clásicas reivindicaciones en la administración de justicia, clama al cielo que ‘justicia’ siga siendo el patito feo de todos los gobiernos». En su opinión y más concretamente, expresa que «es necesario un auxilio judicial más, así como una mayor eficiencia del sistema informático». Este es un juzgado, dice, en el que «la celeridad es clave y la incertidumbre, una de sus señas de identidad al estar permanente el servicio de guardia».
Los inicios
Siguiendo los pasos del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) y el Consell de l’Advocacia Catalana (CICAC), el Il·lustre Col·legi de l’Advocacia de Reus (ICAReus) creó la Comissió de Violència de Gènere i Igualtat en 2018, con Cristina Santos al frente; y cuyo nombre es hoy: Comissió d’Igualtat i Violència Masclista, y está formada por seis abogadas y un abogado.
La responsable de dicha comisión, Mª Pilar Esteban, rememora los inicios en que se creó el juzgado: «Antes de su activación, la necesidad de cubrir la problemática de la ciudadanía que sufría diferentes tipos de maltrato ya se detectó tiempo atrás, abordándose en 1999, cuando se aprobó el Reglament de Violència de Gènere y se creó el turno de oficio especializado –de guardia los 365 días del año y las 24 horas–, constando en los archivos de este organismo, un total de 15 asuntos de este ámbito, derivado al turno de oficio en ese primer año 1999».