La plataforma Salvem La Sedera (formada por la Associació de Veïns Monestir, la Associació de Gent Gran Districte 1 y la Associació Coordinadora Ciutadana i d’Entitats en Defensa del Territori) presentó el pasado jueves una denuncia en Inspecció de Treball en la que pedía la paralización inmediata de los trabajos de derrumbe de la antigua fábrica de la Sedera, en el paseo de Misericòrdia.
La plataforma, en su escrito, asegura que el derrumbe «se ha empezado a hacer a golpe de máquina, pero no se ha hecho la preparación según las normas generales de prevención de riesgos y el Pla de Seguretat i Salut. Además, también puntualizan que la empresa encargada de realizar las obras, contratada por Solvia (propietaria del inmueble) no ha quitado las líneas de teléfono, las farolas y las instalaciones de alumbrado público. Las presuntas irregularidades no acabarían aquí, ya que Salvem la Sedera también puntualiza que «tampoco se han señalizado las obras, ya que no se ha puesto el cartel, no se ha cerrado el perímetro y está toda la zona con coches aparcados».
Pero para la plataforma el tema más grave es que «dentro del edificio hay dos transformadores eléctricos. Uno está tapiado junto a la escalera y el otro tocando a un lateral de la fachada. Estos transformadores tienen aceite eléctrico, propiedades altamente cancerígenas y tóxicas, sustancias refrigerantes, bifinilo y policlorados.». Por último, desde la Plataforma Salvem La Sedera también tienen constancia de la presencia en el interior de un depósito de gasoil «que no sabemos cómo estará. Si tuviese gases podría ocasionar una explosión».